Había escrito una entrada sobre mi generación, que resulta ser la generación Y, por una serie que vi con el actor, en el que el protagonista dice: "Somos la generación Z". A raíz de ese comentario, pregunté al actor, que es generación X, y él me contó que yo era millennial...

Y claro, escribiendo juvenil, la generación Z me interesa bastante.

Pero luego me despistó la luna, que ayer estaba preciosa. Justo por la mitad. La mitad de la luna oscura, la mitad de la luna clara. Y era tan bonita, que en lugar de ver la televisión, me quedé contemplando la luna. Y también los planetas. Sé que son planetas porque no cambian de color cuando los miras, su luz siempre es constante, mientras que las estrellas, cambian de rojo a azul, de azul a blanco... parece que brillan de otra manera. Desde mi piso (que es como una torre) siempre veo Orión. Cambia mucho, del verano al invierno, pero está ahí. Medio escondida por el cercano edificio de enfrente.

También vi Una mente maravillosa, y me encanta cómo está contada la película. Pero sobre todo me encanta cuando él dice: "Ella nunca envejece" y "puedo resolverlo" y el médico contesta que no, que no puede porque es su mente la que ha creado el problema. Si alguno de vosotros, lectores, lucha contra miedos irracionales, sabe bien de lo que estoy hablando. Trata de enfrentar la lógica al corazón y verás quién gana. ¡Oh, sí, tenemos grandes armas, como seres humanos... un cerebro maravilloso... pero jo, qué terco es! En cuestión de corazón (de miedos, y en el caso del personaje, de alucinaciones), resulta un poco complicado luchar ... sólo con la lógica.

Hay que usar otras herramientas. Pero me gustó que en la película sus "miedos" no desaparecen. El no tiene "miedos", él tiene "fantasmas". Yo lo que tengo es miedo. Y lo malo es que esperas a que venga otro a resolverlo o, peor aún, ¡¡¡lo que quieres es que desaparezca lo que sientes!!! Y no... Resulta que no va así. Le mente es muy puñetera. Es tan puñetera y difícil de entender que... 

Pero es interesante.

Y me voy ya. Que llego tarde a mi paseo en bicicleta.