En el que me compro sus calcetines.

 


Os voy a contar un secreto....

..... me compré los calcetines que lleva mi compañero de trabajo... ¡¡¡Ssssshhh!!! No se lo digáis a nadie. Harta de buscar y buscar... los he comprado de hombre y no importa, no importa, ¡porque nadie va a enterarse!

Es un secreto.

También tengo unos calcetines de mi querido actor, pero esa es otra historia.

Dentro de mis "poco habituales cosas" está que me chiflan los calcetines. Pero mucho.

En realidad nadie lo sabe. Bueno, lo sé yo... y ahora vosotros. Pero el hecho de que me fascine mirar por debajo de la mesa para ver los calcetines del Muso ¡jajajajaj!... No, espera, no es por lo que vosotros creéis. 

Es que un día los llevaba desparejos. Fue hace mucho, la verdad... Ahora los lleva "parejos" de colores chillones. Me chiflan sus calcetines.

Y, harta de desearlos, al final me los he comprado yo.

Entiendo que un 39 es un 39... seas hombre o mujer. Cierto que yo uso una talla 38 pero, ¡son calcetines! ¡Quién lo va a notar! ¡Nadie!

Y sin son largos y grandes me los subiré hasta la pantorrilla e iré de colores.

¡Jajajajja!

No quiero joyas. Yo quiero calcetines.

:P 

Pero no se lo digáis.

Yo no se lo voy a decir, ¡qué vergüenza! La gente se compra "cosas de marca" y no imita calcetines sin marca. Me acuerdo de un ex-novio que tuve hace muuuucho tiempo, que le dijo a un amigo suyo, en tono de broma:

-¿Ella? Le regalas una joya y no sabe que hacer con ella....pero llegas un día a casa con una bolsa de papel con comida de un restaurante nuevo y le brillan los ojos...

Pues claro..

A ver, ¿acaso te puedes comer una pulsera? ¡No! Sin embargo, ¡una bolsa de papel marrón es un misterio!

¡Como sus calcetines!

¡Jajajaja! ;D 

Libros y pequeña corrección.

 ¿Sabéis una cosa? Encontré el corte de la serie Big Bang Theory al que me refería con la bandera y Sheldon disfrazado de Betsy Ross. Entendí por qué me hace mucha gracia toda la escena (es una auténtica payasada...) pero en honor a la verdad, pues no la encuentro traducida, creo que no dice "falacia" sino "majaaaderíiiiia", ¡Jajajajaj! Es que me resulta muy gracioso como se enfada y lo que dice.

Acabo de ver el último capítulo de Shogun (ya os vale, guionistas) y también tengo que deciros algo. Bueno, me ha encantado, por supuesto. De hecho, estoy casi enfadada... Pero debéis saber una cosa, y casi tengo olvidado el libro, en él quién pide hacerse el sepukku es el Anjin. Esa escena no sale en la serie. Yo la novela casi no la recuerdo, obviamente, la leí con doce o trece años... con once leí El Señor de los Anillos. Entre medias.... o poco después, cayó Tiburón (de la que hablaremos otro día). De Shogun recuerdo mucho el inicio, lo del acantilado, lo de hablar y reírse porque no le entiende el otro y estar enfadado pero como no lo entienden... Recuerdo como el Anjin se adapta. Eso sí. Y recuerdo cuando se vuelve japonés. Lo dice así, el libro. "Se volvió japonés". Y fue cuando, en plena reunión, dijo: "Pues permitidme quitarme la vida". Lo recuerdo porque si yo estaba enfadada con esa facilidad para quitarse la vida tooodo el tiempo, con aquel giro me enfadé con él. "¡Hala, otro!" En verdad es una estratagema. Eso no ha salido en la serie. Pero no importa porque sigue siendo una serie fantástica, coherente, con ritmo, bien hilada, fiel a la novela o a su espíritu por lo menos, respetuosa y -encima-, en japonés. Lo que es arriesgado. 

Iba a hablaros de más libros pero es que no tengo mucho que decir que sea políticamente aceptable. Bueno, yo os lo cuento: Farenheith y 1984 se van a ir fuera de la casa. Sé lo que me diría un adepto a la literatura. Son clásicos.

Pero es que me caen mal.

El de El Partido me deprime profundamente. No soporto al protagonista. Y en cuanto al otro, ya sabéis que el autor hace trampas. O dulce, o salvaje. Uno de los dos narradores no es real. Es fingido. Y a mí no me llama mucho una novela de "quemar libros"... que mezcla claros y luz de luna y belleza con "sus tripas estaban espachurradas por el salón". 

(Mirada penetrante...) Nelly-modo-detective-on: "Uno de los dos estilos no es el suyo, es una pose". 

Apuesto a que el estilo más duro es su yo real.

No uses fingimientos al escribir.

Diréis, "Bueno, Nelly, los autores saben ser versátiles"

No. No es lo mismo. O "claros de luna" o "tripas por el salón". Los dos, en la misma novela, separados por pocos párrafos crean algo que los críticos adoran pero que yo llamo de otra manera. Yo también construyo con palabras. Uno de esos narradores es real. El otro, no.

Igual debería leer "Crónicas Marcianas". Lo digo porque con Dalh, de niña, me hizo trampas y sin embargo pensé que era un genio. Al leer sus cuentos he conocido a Dalh de verdad. Él está en sus cuentos. Ese humor negro está por todas partes (El ascensor) así que no es que fuera un autor juvenil con ese ribete de humor negro. Es un autor de humor negro que decidió escribir juvenil.

Os cuento mi experiencia con Dalh y con esto acabo la entrada. Yo era muy pequeña y leía Charlie y la Fábrica de Chocolate. Y leyendo ese libro felizmente recuerdo que le dije a mi yo interior: "Nah, tranquilo porque está prohibido matar niños en las novelas".

Prohibido. 

Y justo entonces a Augustus Glup lo absorbe una tubería. Y recuerdo que lo tuve que leer dos veces (pasé la página pero volví atrás). Sorprendida. 

"¿Espera, qué...???"

Y eso está en Dalh todo el tiempo.

Sólo que en las novelas adultas se olvida al marido dentro del ascensor. ¡Jajajajaj! Tiene un cuento increíble de bueno. 

En fin, igual es sólo una opinión personal. Pero Dalh es diferente. Él usa el humor, y lo adapta a los niños pero sigue siendo él. No es un artificio. Sin embargo la prosa de Bradbury sí es un tejemaneje. Dos visiones tan diferentes y contrarias crean confusión. No es que sea salvaje y se impregne de cierta dulzura. No. Si tú hablas de claros de luna y de belleza comparable a las ninfas de la noche sabes de sobra el ambiente que estás creando. Y si acto seguido abres una puerta y hay sangre por el suelo sabes de sobra que estás jugando con el contraste. Para algunos críticos es genialidad. Yo no estoy de acuerdo con esa forma de construir.

No me gusta que me tomen el pelo como lectora. 

:P Pero, ¡bah! ¡qué sabre yo! Soy comercial y he leído cinco veces a Wilkie Collins y su Hotel Encantado. Mi novela favorita es Middlesex y no soporto Crimen y Castigo, por más que intento leerlo.

No soy una autora ni lectora culta. Sólo sé lo que me gusta y lo que no.

Y esto, queridos internautas, no es más que una opinión personal.

¡Saludos! (si la cambio, os aviso) 


fuente imagen: clic

De meditaciones y casualidades.

 



A mediados de semana pensé escribir una entrada con momentos de series que me hacían reír mucho, porque pensé que eso me distraería. Hablaba de un momento en Big Bang Theory cuando Sheldon usa la palabra falacia para referirse a un evento sobre la bandera norteamericana que me hace reír mucho, por cómo lo dice (culpa, quizás, del doblaje...) y porque se enfada mucho con la creencia común errónea de quién inventó la bandera. Acabada la entrada, donde hablaba de Los Simpsons, de economía y de más cosas me dije a mi misma: "No puedes publicar esto".

Mi "yo interior" a menudo contesta sin palabras. Pero lo que yo le digo a él sí se expresa en un pensamiento:

"¡Pues porque a nadie le interesa que te haga gracia el uso de la palabra falacia! Así que borra la entrada y se acabó!!!".

Y borré la entrada.

Esa noche soñé con mi compañero de trabajo. Le contaba, muy estresada, lo que me preocupaba y él me decía: ¿por qué te enfadas? y se ponía a cantar.

Casualmente, al día siguiente, fui a verlo y le conté, muy estresada, lo que me angustiaba (además del sueño) y él no sólo me escuchó y me dio buenas sugerencias, sino que además dijo:

-La xxxxxxx es una falacia....

¡Jajajajajajajajaja! 

No se me va a olvidar esa frase. No os la voy a revelar entera, por si me lee. Además, estoy de acuerdo con su afirmación. Cierto se que puedes hacer varias cosas si unas van en segundo plano, pero es realmente estresante hacer varias en primer plano, a la vez. Es más, es imposible.

Fue el uso del término "falacia" lo que me hizo reír muchísimo porque es poco habitual. Y me dije a mi misma: "Falacia..., qué casualidad". Y le dije: ¡qué casualidad! y él me corrigió. Creo que no cree en las casualidades. Me dijo que no lo era. 

Al llegar el viernes, por la tarde, fui a meditar. Antes de ir, mi compañero me dijo: "¡Cuidado con el escalón!" refiriéndose a cierta tarea laboral y le dije: "Descuida".

Pero resulta que me tropecé dos veces ese día por la tarde. Y me dije a mi misma: "Si te dice que tengas cuidado con el pañuelo rosa, vería pañuelos rosas por todas partes. El truco es que cuando te dicen que no pienses en algo, piensas en ese algo... Así que ahora te darás cuenta de cada vez que tropieces porque él ha dicho algo de un escalón... cuando el evento del que habla se ha pospuesto y no lo sabe".

Así argumentaba yo para mis adentros mientras iba a meditar.

Debo decir que la meditación no salió como esperaba. Llevo ya dos días en el Templo que acabo con un dolor terrible cuando medito. La primera vez culpé al cojín. Era muy duro, pensé. En esta ocasión me fijé en que la guía había puesto unos cojines diferentes... pero como a los cuarenta minutos o así de empezar la práctica yo...

Me empecé a sentir fatal. Y claro:

"¿Qué es? ¿Es el cojín?... ¿es el estómago??? ¿Pero qué pasa??"

Y cada vez peor y cada vez peor y cada vez con más nauseas y entonces:

"Me he envenado", ¡Jajajajajaj!

No, en serio, el malestar tomaba cariz de corte de digestión, o algo. 

Os doy mi palabra. Allí, tumbada, pensando: ¿¿¿qué tomé que me sentó tan mal??? ¿el agua? ¡Oh, cielos, voy montar una escena si interrumpo una práctica porque me dan náuseas! "El agua no era potable" Me obsesionó la idea. 

Aguanté como pude... realmente como pude, y cuando sonó el ¡gong! salí como un rayo, tras una despedida brevísima, y salí a la calle y pensé: "Por favor, que no te de un jamacuco aquí!" Que yo soy una chica muy vergonzosa y no entendía lo que me estaba pasando. Unas ganas de vomitar terribles.

Regresé a casa muy, muy, muy, muy, muy, muy despacio. Los caracoles a mi lado eran de carreras. 

Y pensé: "Vale, la siguiente meditación te la saltas".

Medito mucho en casa pero no encuentro explicación para lo del Templo. Es como si el aire estuviera muy cargado. De hecho, al salir el aire de Madrid estaba demasiado sucio. Y me dije a mi misma: "No empecemos con el exceso de sensibilidad". Y, afortunadamente, había contratado una excursión fuera de la ciudad así que.... ¡menos mal!

Al respirar en el campo el aire era diferente. Lo noté llegar hasta donde tiene que llegar. Aire limpio. Campo, nieve... un río. No sé qué niveles de contaminación tenía Madrid el viernes pero os aseguro que era irrespirable.

Antes de llegar a la montaña, ocurrió otra cosa curiosa. Una de las cosas que me había "ofendido" esta semana pero que no le había contado a nadie es que una chica del trabajo entró en la oficina pidiendo dinero para pagar un taxi.

Alcé las cejas sorprendida. Y le dije a mi yo interior: "Ni se te ocurra..."

Mi yo interior contestó sin palabras y yo repliqué en forma de pensamiento: "Porque ya es el colmo usar un taxi para venir a trabajar sin tener dinero para pagarlo".

Es el colmo del caos. Del desorden. Y me enfadé. Entre bolígrafos que prestas y no vuelven, paraguas que dejas y no vuelven... ya el colmo era "déjame dinero para un taxi". 

A lo que siguió un apasionante debate con mi yo interior sobre cómo puedes coger un uber sin llevar dinero para pagar.

Para ir al punto de encuentro del viaje al campo yo pensaba usar el autobús. Pero al salir de casa me dije a mi misma: "Bueno, igual debería tomar un taxi". Con tal intención llegué al portal. Pero dio la casualidad de que me fijé en la opción de tomar un Uber. Sabía que llevaba 20 € en el bolsillo. Y me dije: "Bueno, pues úsalos para el uber que siempre es más barato". 

Encargué el viaje. Me dispuse a esperar y entonces me dije a mi misma: "Voy a revisar que lleve esos 20 euros, no sea que me pase como a la compañera que..."

Al revisar compruebo con estupor que solo llevo 10. Y el viaje cuesta 12.

-¡Jajajajaj! -oh, señor.

"¿Quién toma un uber sin llevar dinero para pagarlo? ¡Es el colmo de la irresponsabilidad!". Las palabras acudieron a mi mente no exentas de ironía.

Pues yo misma.

Esto, interanáutas, es una improbabilidad cósmica bastante curiosa. 

Pero no me enfadé.

Es más, se disparó mi parte creativa.

-Podría subir a casa de nuevo...

(¿En un minuto?...)

-No, cierto. Es poco tiempo.. ¡ya sé, le digo que me lleve a un cajero!

Eso hice. Pero ya en lugar de ser un viaje serio, fue un viaje distendido, hablando sobre aplicaciones, viajeros olvidadizos y demás. 

Lo gracioso es que en veinte años de usar taxis/ubers y demás, jamás he subido a uno sin tener la certeza de poder pagarlo. Me preguntaréis: ¿y por qué no usaste la tarjeta? Pues porque precisamente lo tengo puesto solo para efectivo. Y me diréis lo que me dijo el conductor de Uber: ¿por qué no cambias el método de pago? Pues porque lo hicimos pero misteriosamente la aplicación no lo aceptó. Cosa que le dejó a él tan sorprendido como a mí, o mejor dicho, a mí no me sorprendió porque son el tipo de cosas extrañas que me ocurren. Como que el compañero use la palabra falacia por primera vez en 14 años de relación laboral, justamente el día posterior a que yo me pase diez minutos reflexionando sobre el término.

"No lo creas, es una falacia."

Ya puestos a aclararlo, el personaje de la serie estaba muy disgustado y sin venir a cuento dijo que la creencia popular de cierta persona había inventado la bandera norteamericana era una auténtiiiica falaaAcia... Lo que me hizo gracia por cómo lo dijo.

El caso es que llegué a la montaña, hice amigas en el trayecto (no sé, nos juntamos cuatro en el punto de encuentro e hicimos buenas migas) y nada más entrar al refugio de montaña, caminado despistada me salto un escalón y no me voy de bruces de milagro, pensando, eso sí, mientras me caía:

"¡Esta no cuenta!"

Refiriéndome, claro está, al compañero y su advertencia: Cuidado con el escalón.

Y diciendo mi "yo interior" que claro, claro, no cuenta...  Y yo reiterando que es todo casualidad.

Subimos la montaña partidos de risa porque el guía sumó 4 kilómetros más a la ruta y si aquello era un "nivel principiante", el viaje de Frodo a Mordor era un intermedio... Yo no hacía más que pensar en que me parezco a Bilbo Bolsón cuando sale de viaje... Llevaba una mochila exagerada, cargada con agua, comida, fruta, ropa de abrigo, una muda... como si me fuera a la Patagonia y dio la casualidad de que tomé tres desayunos. Como los Hobbits.

Fue muy divertido.

:D En conclusión: nunca subas a un Uber sin dinero y por si acaso no lleves la contraria al compañero. 

¿Qué crees que sí he hecho y qué no?

 No os voy a decir qué cosas son, pero solo hay 2 de esta lista que no he hecho: ¡Adivina cuáles!

1) Dar la mano a los vocalistas de Roxette.
2) Estar de fiesta en la primere del Diablo Viste de Prada en Barcelona.
3) Ver un cocodrilo en México.
4) Montar en moto de agua.
5) Saltar en paracaídas.
6)Disparar un arma.
7)Ver el atardecer en Túnez.
8)Tropezar con Bruce Willis en Gran Vía.
9)Conocer al actor que pone voz al director Skinner, y estar una tarde con él.
10)Saltar por una ventana para ver ir a ver las Perseidas.
11) Tirarme un cubo de agua fría por la cabeza y decir: ¡ya está, duchada!
12)Decirle a un taxista: ¡rápido, siga a ese coche!
13)Tirarme en tiro-lina desde el tejado de un edificio custodiado por agentes armados.
14)Ser perseguida por un guardia de seguridad al que había alertado un helicóptero que sobrevolaba la azotea con dirección a Moncloa.
15)Estar en un desierto de sal.
16)Bañarme en Cádiz
17)Ver un concierto en Venecia.
18)Montar en helicóptero.
19) Charlar con Jordi Sierra i Fabra
29) Salir en Cinemanía.
30) Pasear por el Sahara en camello.
31)Nadar con un delfín (y que me diera un coletazo. ¡Duele!)
32)Pasear a las 03:00 de la madrugada por los camerinos y los escenarios del Teatro Real de Ópera, en una visita secreta...gracias a ;) que un contacto nos dejó pasar mientras todos duermen. Ver el piano que había en algún camerino, ver que los escenarios son INMENSOS, dentro casi cabe una plaza entera de una ciudad... y suben y bajan. ¿Será verdad? 






Con muchas ganas de leer...

 


En cuanto acabe El Hombre del traje color castaño, podré empezar otro título, pero tengo mis dudas sobre con cuál seguir. Por un lado El retrato de casada me llama la atención, pero tengo ahí la segunda parte de una novela que leí hace muchos años, Un mundo sinfín y también me llama la atención. Os voy a contar una cosa de la primera parte (Los Pilares de la Tierra): lee la maldición de Ellen cuando inicia el libro, luego lee las dos mil páginas o más que tiene, luego cierra el libro y piensa...  Vuelve al inicio y comprueba... Verás que el autor es un genio.

Podría también recurrir a releer El Hotel Encantado, o seguir con el libro de fantasmas del siglo diecinueve, pero es que ese último es un poco aciago. 

También tengo pendiente "El Mercader de Venecia", "Paraíso inhabitado", "El Club de los Viernes" y Damas de oriente.

O puedo decantarme por algo más oscuro... Ya sabéis, de mi biblioteca... la sección de Libros Prohibidos.

Pero, no sé, no sé, en un día de Eclipse Solar... :D ¡Jajajajaj! ¡Lo mismo es mucha penumbra!

¡Saludos lectoriles!

Juegos de los 90.

 


Creo que merece la pena destacar algunos momentos de los juegos de mesa (Trivial) de ayer.

Primero: mientras contemplo la Rueda y como la gente "va y viene", salta un mensaje en el móvil de mi amigo periodista. Muy sorprendido, nos mira y dice:

-Es Vivet

(Nelly es a Eva, lo que Violeta es a Vivet)

-Hacía muchísimos años que no me escribía -prosigue. Y entonces nos muestra lo que le ha mandado, es una foto de hace 20 años en una discoteca en la que estamos casualmente los tres que estamos reunidos en esa mesa.

-¡Jajajajaj! ¡Venga ya! -me río-, ¡Jajajaja!

Miro la foto. Mi amiga Z mira la foto. Y otro amigo que acabo de traer al grupo no la mira porque él además no entiende lo que acaba de pasar.

-Qué tremenda casualidad que me escriba hoy para mandarme esto.

-¡¡Tienes que mandarle tú una de lo que está pasando ahora!!

Nos sacamos la foto. Es como el día aquel que el actor y yo nos mandamos la misma foto y resulta que estábamos en el mismo tren. Tuvo gracia porque los dos decidimos mandarnos la misma foto a la vez, de forma que yo pensé que mi móvil se había vuelto loco porque el atardecer que acababa de fotografíar me había llegado a la vez al móvil. Además, lo hicimos mientras hablábamos de romper lo que tampoco daba pistas ni pie a interrumpir la conversación con la foto. Fue la casualidad más grande de mi historia.

Nada más mandarle la foto a Violeta, pensamos y dijimos casi lo mismo:

-¡Se va a creer que nos vemos todos los fines de semana, a pesar de que han pasado veinte años!

Realmente, estar juntos con los juegos tampoco es algo habitual.

Ese fue un momento.

El otro momento fue un diálogo interno en el que me di cuenta que tengo mucha información siempre que salga en libros, a ser posible de ficción. Así que a la pregunta:

-¿Quién era el maestro del folletín francés?

-Dumas -contesté.

-¿Qué camello de áfrica es el más veloz?

-El tuareg conducía un menhari...

Vale. Pero:

-¿Qué tratado rompió Hitler al invadir Polonia?

Ahmmm (esta no me tocó a mí)

-¿Qué político subió al poder tras la dictadura de...?

Ahmmmmm (tampoco)

En un momento dado, mi amiga Z dijo: "¡Jo, a por Eva que tiene ya dos quesitos, yo no quiero quedar la última!" Y aplastó deliberadamente mi círculo con el suyo... acto seguido se mueve y el bolso que tenía en una silla sale volando y se va al suelo. 

-Karma -le dije yo.

Nos reímos todos.

-Deja de querer aplastar mis quesitos, Z. ¡Qué más da, con que tengamos al menos un quesito cada uno!

(No me gustan los juegos de conflicto)

Saque la conclusión de que he olvidado toda mi Enseñanza primaria y secundaria, lo cuál me sorprende. Antes era muy buena en historia, leía los conflictos de los países con verdadera pasión y llegaba a establecer pautas anticipativas según su trayectoria. Pero... por algún motivo, al empezar a ver las noticias todo eso dejó de interesarme. Tiene gracia cuando ves que un gobernante por intereses económicos, se va a lanzar a una guerra sobre el papel. No la tiene cuando enciendes la televisión y ves gente sufriendo. 

Es el conflicto de siempre (para mí) pero todos cuantos me rodean me dicen lo mismo: "No te gusta, pero es el mundo en el que vives" y "no puedes mantenerte tan al margen de lo que pasa, porque es tu mundo".

No sé. Es como exponerte a los conflictos del trabajo pero a escala mundial. Ves a los actores, ves lo que está pasando y nadie te hace ni puñetero caso  para resolverlo porque -aunque tu solución funcionaría muy bien- ningún humano piensa así.

No sé, lectores, yo pasé tres meses sin ver la televisión. Al apagarla, había un político que era fuerte y pionero y viva su partido y todo eso, al encenderla... su propio partido quería mandarlo a la cárcel, porque había traicionado a otro colaborador al que apoyaba tres meses atrás. Es como si te metes en una caverna cuando cierto estadounidense es actor y al salir te lo encuentras de presidente. 

Mi pregunta es: ¿y todo para qué?

Si comparas dos situaciones presente a presente te parecerá realmente absurdo lo del medio. ¿Yo me lanzo en una campaña militar para que esa frontera que ha costado mil vidas, cuarenta años después vuelva a moverse?

Y me diréis: Ya, Nelly, pero entonces, ¿qué? ¿no vivimos?

No. No se trata de eso. Es sólo que considero muy absurdo movilizar gran cantidad de recursos para cosas que hoy son urgentes y resulta que mañana, por motivos emocionales, ya no lo son. Para eso, dime de entrada que no es tan urgente sino la cosa urgente del momento. 

No sé.

Son movimientos pendulares. Si hoy es muy "progre" ser de izquierdas y ciertos valores, mañana, nuestros hijos, por romper con lo anterior, serán "modernos" siendo conservadores.

¿No podéis, no sé, llegar a un punto medio en el que no haya que estar de extremo a extremo haciendo todo como locos?

Bueno, ya me callo.

Total, que tras preguntarme a mi misma, porqué recuerdo frases de libros de manera literal y no sé quién gobierna hoy en Urugay... decidí que.... bueno, debo comprarme algún libro que hable del (Conflicto geopolítico actual) mundo de hoy. No por nada, es que no está bien saber que la avutarda es el ave que vuela más pesada de España, o que Herschel quería ser músico, o que la orca es el mayor representante de la familia de los delfínidos y no tener ni idea de con quién está casado Macron (¡y casi ni saber quién es Macron!) 

La pregunta que me hago es si es de utilidad conocer los conflictos actuales y los actores políticos actuales porque de poco me sirve a mí saber quién gobierna tal país, si no puedo evitar que provoque una guerra. No os digo nada la televisión, cuando el otro día al encenderla escuché a un alegre tertuliano decir: "¡Pues igual tendríamos que olvidarnos de la Europa de la paz!" y lanzar eso con alegría, como quien habla de cambiar de jersey o de perfume. Pedir al público que se olvide de la "mentalidad de la paz" como si no estuviera jugando con millones y millones de vidas. Una persona que, por su edad, desconoce el sufrimiento o bien es tonto y parece que está celebrando el mayor horror humano... No sé. Por eso no veo las noticias.

Me estoy replanteando lo de comprarme ese libro de política, la verdad. Bueno...

Momento tres.

Hubo muchas risas pero cuando propuse jugar al Scatergories (que me encanta) ocurrió algo muy gracioso. No tenemos el juego, pero las listas están en Internet. Con la letra J tuvimos que poner un título de canción. Y mi amiga Z dijo:

-¡Jo, qué noche!

Alcé las cejas porque no tenía ni idea y los demás dijeron: "MMmmmh, creo que es película y no canción!"

La estrategia y aceptación de todos era: "bueno, títulos de canciones hay mil, así que tanto eso como lo de nombres de calles,... damos todo por bueno".

Pero M no estaba de acuerdo. No, desde que ella escribió Jockey con "J", y F comentó que si eso valía entonces: "Jitler" también, lo que me hizo reír muchísimo pero procuré no mostrarlo. Recuerdo poco de historia pero seguro que el dictador no se escribía con J.

Total, que tiramos del móvil.

Jockey= chistoso.

-Ahm... no, Z., no sale. Ese título es de una película -comento.

Ni sé de cine clásico, ni de mundo actual.

-¡Ah, bueno... bueno, vale, es que... lo puse por poner algo! ¡Seguro que alguna canción se llama así!

A esto que M. lleva un rato con el teléfono (Z. es soprano, tiene una voz maravillosa de alta, y da la casualidad de que M cantó en su coro con la voz contraria, muy grave. Entre los ojos enormes de M. y la voz, es como si pones un tambor sereno y bajo junto a un brillante campanilla alegre). Así que se oye a M. lo siguiente:

-Creo que sí es una canción.

Silencio.

-Sí... es una canción de XXXX.

No voy a revelar lo que tapan esas XXXX pero es que... es el nombre de su grupo de música.

-¡JAJAJAJAAJJAAJAJAJ!

Me da un ataque de risa. 

¡JAJAJAJAJJAJAJAJAJAJAJ!

A ver si lo he entendido: M. para el juego para descartar la respuesta de Z. Porque eso no es una canción. Tras realizar varias comprobaciones... M dice: "un momento, creo que es una canción..."

Suya.

-¡JAJAJAJAJAJAJJAJAJAJA!

Z. me mira.

M. sin variar un ápice su expresión serena la pone y empieza a sonar.

Z. y yo:

-¡JAJAJAJAJJAJAJAJAJ!

-A ver si lo entiendo... ella escribe por casualidad un título, y resulta que tu grupo ha compuesto esa canción.

Pero no solo eso, sino que M. fue el primero en decir que no existía. Lo que es como si yo pregunto aquello de: "Es el cumple de las gemelas... ¿pero de las dos?". ¡Jajajjajaja!

Ya puestos, dejó que sonara el siguiente tema. Si hasta el momento los Beatles y el jazz me habían ayudado y no molestado mientras contestaba preguntas, aquel nuevo grupo en castellano repitiendo (con el estilo de grupo indie) "Pero yo quiero tocar en Málaga" me interfería ya que alcanzaba (vamos a decirlo así) a mi "yo interior". Y le hacía reír. Podía ignorar o asumir lo demás pero aquella tontería de un humano diciendo: "bah, si lo más cool es tocar en Málaga" me hacía reír muchísimo.

-¡M. no puedo escribir así! -le dije 

Y Z. contestó:

-¡JOLÍN, YO TAMPOCO!

Y nos reímos los cuatro.

Fue super divertido. Luego se armó un tremendo debate con la parte de villanos porque M puso a Julio César, yo dije: ¿¿¿cómo??? y Z. puso a Ana Bolena, lo que me arrancó una mirada escéptica pero viendo sus ojos brillar dije: "bueno, vale... supongo que buena, buena, no era". Pero el debate sobre si Julio César era o no un villano se amplió bastante.

Yo puse Alien.

Y con J. no puse nada. F amenazó con que si Jockey valía como deporte él pondría a Jitler.

Nos dieron las diez de la noche y yo concluí que los mejores juegos de mesa son los de los noventa. Ahora quiero un trivial.

Eso es jugar y no pasarte siete horas leyendo un manual y otras quince explicando las normas.

Creo que voy a comprarme un atlas para estudiarlo :) o un diccionario para leerlo. Eso lo hacía de niña. Podría retomarlo. :)

:) :) Sabéis qué pregunta fue "guay".

-¿Cuál es la letra por la que acaban todas las palabras japonesas que no terminan en vocal?

La pregunta iba para Z. Todos me miraron a mí.

-Esa la sabe Nelly.

Nelly se la preguntó a Coso.

Pero no siempre me contesta.

M dijo: "Que Z. diga su respuesta y luego nosotros damos otra respuesta".

Y yo pensé:

(Koban-Wa. Buenas noches. Koban acaba en N. ¿Qué más palabras japonesas conozco?)

Por más que repasaba, todas acaban en vocal. Oyasuminasai, Inu, kaze, Konichiwa, sorewa, desu, des ka, hatchi, sakana, geisha, usagi, mattane, ona anata,...

Z dijo: "¿R?"

Me miraron. Yo dije: "N" y luego mi amigo periodista y músico dijo: "N". 

N lo dijo porque Japón en japonés es Nihon. 

Pero claro, no me preguntéis por el gobernante de Polonia porque de eso no tengo ni idea.

¡Tengo que aprender más! 



Pero qué o quién (o qué) es "Coso"


clic en la imagen a su fuente. CCPixbay

Hoy me ha pasado algo curioso.

Estaba atendiendo la Sala, y hablaba con una persona y con otra, centrada en esa única labor. La Sala. El caso es que estaba atendiendo a un agente, y a otro lo puse de escuchas, para otros dos tuve que buscar profesor, entre medias me preguntaban otra duda... y otra... Entonces uno me dijo que se había roto su ordenador y no podía seguir con las escuchas y se me ocurrió al instante.

(La otra formadora de la Sala)

-Vale, voy a decirle a...

(Menganita. Asociada originalmente a XX / Apellidos / Nombre / es la que tenía un problema con XXXX)

-¡Menganita, colócate con...!

Pasadas 7 horas, de repente, un agente en prácticas me dice:

-¡Nelly, ayúdame, tenemos sin resolver ese caso!

Llevo 7 horas atendiendo casos. Miro al compi que me pide ayuda y...

(Es el expediente de 25.7 en el cambio/ caso tal/ petición tal)

La información se despliega ante mí.

-El de los 25.7 -digo.

-¡Sí! ¡Eso es!

-Vale, te digo lo que tienes que hacer...

Y entonces:

-¡Nelly! -otro compañero-, sigo con el cliente al teléfono.

(Que mire el número de XXX. Es la respuesta a la pregunta)

-Tiene diez xxxx.. dos de... larga distancia....

(2022 y 2023)

-¡Sí! ¡Sí, eso es! ¡Pero no lo quiere admitir!

-¿Le has dicho que mire...?

-Sí. Muchas gracias.

Me acerco a hablar con diez nuevos que he sentado al fondo.

(Él es Marcos, ella Sara, la de la esquina es Tamara, el del jersey se llama Luis y ha tenido un problema con el portátil, si lleva la camiseta negra su nombre es Rosa...)

Cielo Santo.

Generalmente, no me sé el nombre ni de los veteranos. O, más bien, asocias 562 nombres a... caras que no son.

Vuelvo a mi sitio. 

"¿Pero qué está pasando?"

"¿Todo esto por no centrarme en dos tareas?"

Regreso a casa y se monta un monumental atasco antes del cambio de rasante de la entrada de la M40 en Madrid. Yo llamo a ese lugar "el falso puente". ¿Por qué? Pues porque pasas debajo de algo, un tipo de estructura que no es un puente ni mucho menos y arroja sombras "a trozos". Es como si pasas debajo de un puente pero no lo es. Yo lo llamo "el falso puente".

Llegados antes de esa zona, antes de la cresta del desnivel, indico con warnings que más vale que vayamos todos frenando.

Y me digo a mi misma:

"Será mejor que me eche al derecho en cuanto sea posible. Aquí siempre se forma el mismo tapón y no es más que los 4 carriles juntándose. El carril derecho actual desaparece, luego todos esos coches pasan a mi carril. Entonces bajas, te unes al nuevo carril derecho que procede de la otra carretera, y listo. En cuanto pueda me echo a ese carril, aunque vaya más lento. ¿Qué más da que vaya más lento? Lo mejor es que me eche y punto, así no tengo que cambiarme más..."

(Salvo para esquivar el accidente)

Bien. Quiero parar aquí porque es el origen de esta entrada. Eso entre paréntesis y cursiva es lo que yo digo de: "Coso me habla". A menudo no usa palabras. Casi nunca, de hecho. Pero otras veces... sí.

Y yo, claro, respondo pensando:

"¿Accidente? ¿Pero qué accidente? ¿De dónde te sacas que el derecho tiene un accidente?"

Bajo la rasante y estiro MUCHO el cuello. Solo se ven tres filas de coches, como es habitual, ralentizadas. Como es habitual. Estiro más aún el cuello. Miro a lo lejos. No veo accidente.

(No tendrás que cambiar de nuevo de carril, salvo que tengas que esquivar el accidente)

"¿Cómo puedes saber que ahí delante hay un accidente de dos vehículos en el carril derecho?" Formulo la pregunta muy despacio y muy intencionadamente. Quiero ver si esa "cosa" me responde. 

(Porque lo sé)

Vaaaale.

"No se ven" pienso.

(Pero están ahí)

Bien. Hoy es uno de esos días, me digo. 

Debería echar la primitiva??? la Bono-Loto???

Bajo la carretera, pongo el intermitente. Miro a los de mi derecha, que como ya os he dicho es un carril nuevo de otra carretera, marco el cambio de carril y le digo a Coso, mentalmente:

"Me voy a cambiar igual"

En realidad me lo digo a mi misma. Porque, sinceramente, entiendo que Coso es algún tipo de mecanismo del cerebro...

"Me cambio... voy a hacerlo"

Esperando que Coso me lance una alerta de: ¡PUES TÚ VERAS! o ¡NO, CIELOS, NO! o ¡GRITOS! o... o algo así.

Pero Coso no lanza esa alerta. Solo repite: 

(No tendrás que cambiar de nuevo de carril, salvo que tengas que esquivar el accidente)

Me cambio de carril. Reduzco y alargo la distancia con el resto de los vehículos. Voy conduciendo con la total convicción de que me voy a encontrar.... un accidente, mirando si tengo hueco en el carril central, cosa que nadie hace porque todo parece estar como siempre. Y de pronto:

El coche de la Guardia Civil ha buscado refugio en el arcén oculto del Falso Puente. Las sirenas están apagadas y las luces no se ven desde la distancia, hay que acercarse mucho para ver los destellos. Los demás coches siguen avanzando por el carril derecho ya que los dos vehículos, con golpes leves, con las conductoras fuera, con chaleco, hablando por teléfono, han sido apartados debidamente y están pegados a la pared de la estructura, mal llamada "puente". La Guardia Civil también se ha retirado contra la pared porque el tráfico se ha reanudado. Están guardando señalizaciones en el coche, y miran a Nelly al pasar...

 Y yo les miro a ellos.

Alzo las cejas.

"Vale. Había un accidente... Y no he tenido que cambiar de carril... jajajajja, salvo que hubiera tenido que esquivarlo, claro. Efectivamente. No ha hecho falta cambiar de carril."

La pregunta es: "¿Quién puñetas es Coso?" ¿Es alguien? ¿Es algo? Es... una parte del cerebro que vive "fuera".

Ains.

Ya sé. ¡Es lo que inspiró a Sthepen King para escribir El Resplandor! ¡Jajajajaj!

;D o como digo yo... es todo casualidad.


Espera, voy a poner la música inquietante de esta película... ¡jajajaj!
¡¡¡Que alguien pida a mi compañero de trabajo que me explique estas cosas!! ¡¡Él sí sabe lo que es!! En serio. ¡No os miento! 




 

 

 

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