En el que Espasa vuelve a pagarme...
Vale, vale, chicos. Esto sí que no me lo esperaba.
Estaba tumbada en la cama, mirando al techo, arropada con el nórdico y diciéndole a esa parte de mi cerebro: "sueña todo lo que quieras que no se va a cumplir".
Cuando me he dicho: "bueno, venga, que deben ser las nueve, por la luz que entra por las ventanas". Miro el teléfono móvil. Las diez de la mañana. Pienso: "ya te puedes levantar y ponerte a hacer abdominales". Mi otro yo protesta. Quiere más sueños. Sí, me puedo pasar el día soñando...
Pongo los datos. Llegan como siete u ocho whasaps y varios e-mails. Los whasaps proponen hacer un grupo para música (Las Supervisoras con las que compartí módulo, son geniales), acepto. Otro whasap pone: "¡Cómo mola!" y pienso: "¿el gif?" le doy al gif de Mafalda y debajo veo que pone: "Tu dibujo, Nelly".
"Ah! jajaja"
Ya... no, yo no pensaba... o sea... bueno.
Abro el e-mail.
PLANETA TE REMITE LAS INSTRUCCIONES PARA COBRO DE DERECHOS.
"Menos mal que a mí ya no me pagan" pienso, literalmente y con estas palabras, "porque si no... menudo jaleo para ir a Correos, jajaja, ¡está todo cerrado!".
Abro el e-mail. Mandan siempre dos. La Casa Mágica de la señora Asworth está descatalogada. Salió en 2011. Espasa juvenil te pone dos años en tiendas, luego, como a mi amigo Jorge Magano, te suelen descatalogar. Yo hice que me trajeran unos cuantos libros de Barcelona. Y es verdad que el libro siguió en institutos y que luego me pidió otro editor unos cuantos libros más. Pero cuando lo intenté de nuevo con Espasa..., bueno, mi editora me dijo: "No lo dejes, eres como un soplo de aire fresco, ve a por los concursos. Este año sólo vamos a sacar de política y de crisis financiera" Y me dio la sensación de que quién estaba por encima dijo: "Ya, bueno, para vender dos mil ejemplares..."
El libro, siguió sin descatalogar hasta yo creo 2019, a pesar de todo. Fui a presentar a Tenerife, también lo tenían en el listado de primero de la ESO de Padre Claret de Madrid (y creédme, yo jamás hablé con ellos), estaba en Valencia, en otro Instituto. En Buñol.
Hasta que ya en 2020 me dije: "bueno, ya está bien. Olvídate ya de este libro... " Hablé con Jorge... me olvidé. El libro ha tenido su vida y su recorrido.
Os cuento todo esto para que entendáis que la carta de todos los años es una carta donde pone: 0 Euros. Espasa me pagó un anticipo y ya está. Así quedamos.
Abro el segundo e-mail. "Liquidacion de derechos".
Y me quedo como la niña del dibujo.
-Voy a cobrar.
No puedo creerlo.
¡¡¡¡¡¡Cielos!!!!!
Pero ... pero...
Ventas en e-book.
Pero pero...
Y claro. ¿A quién se lo quiero contar? Al actor.
jajajaj! La gente compra mi libro y yo escribo a aquel del que estoy enamorada. Qué interesante.
No se trata del dinero. Siempre he dicho que vivir de esto era una locura, y no tengo intención ninguna de vivir de mis libros. Se trata de que si te leen es una responsabilidad. Hay que hacerlo bien. Yo escribo por gratitud. Gratitud hacia todos los libros que he leído (sobre todo de niña) que pensaba: "Oh, gracias porque esta persona se ha dedicado a la literatura". También pasa con la música, y con el cine. Y la mejor forma de dar las gracias es haciendo algo parecido por tu cuenta para regalárlo a los demás. Claro que, tienes que disfrutar escribiendo, sino es imposible.
Pero, en serio, cuando veis algo que os inspira mucho (o a alguien) ¿no os mueve a hacer cosas vosotros?
¡Seguro que sí!
Bueno, voy a ver sin me ayudan con la factura.
Es pequeña, que nadie se emocione.
^_^ Pero me parece tan increíble... jolín, me parece tan ALUCINANTE!
jajajaj!
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