No podía creérmelo cuando abrí el Netbook (que es algo así como una tablet con teclado. Yo no escribo con portátil porque no sé que tipo de ordenador necesito y este me vale de momento, pero echo de menos tener un Word decente y otro tipo de windows)

Hasta donde yo leí, había que hacer cambios que afectaban a la estructura del libro, lo que no sabía, es que las dos páginas siguientes de comentarios eran cosas que sí les gustaban.

Seré melona.

He vuelto a escribir al editor. Si lo que me pides es "modifica algo", puedo hacerlo. Pero si lo que me dices es: "no me gusta la idea central", entonces lo que hago es descartar todo y comenzar una base nueva. Llevo tres días diciéndole a mi cabeza "inicia una base nueva". Y mi cabeza se niega.

Y cuando he leído el e-mail completo (mi teléfono móvil no abrió las 3 hojas de comentarios, solo abrió la hoja 1), resulta que hay capítulos que le encantan. 

Necesito imprimir esas hojas. Más que nada porque una parte de mi cerebro ahora mismo está mirando a la otra como diciendo atrévete a pedirme algo... hoy.

Esta bien, está bien. Imprimo las hojas, las leo despacio, buscamos piezas nuevas del puzzle y el viernes mando una nueva escaleta.

Sí, yo tampoco me soporto algunas veces.

 Me voy a auto-regalar un café ahora mismo!