Me está pasando algo muy raro últimamente. ¿Recordáis lo que os dije de la meditación y mi mudra favorito? Pues junté eso con lo que me explico una amiga científica sobre cuando el cerebro tiene "hipo". Vamos a llamar al hipo, fobia, si lo prefieres. Necesito que penséis en algo irracional que no podáis controlar. Y ahora necesito que probéis a argumentar racionalmente el porqué esa situación es absurda, a vuestro propio ser. Ya os adelanto algo. Ese algo irracional y tú no vais a hablar el mismo idioma. Es como tratar de explicar una puesta de sol con un diagrama de pantones. Ese algo irracional no os va a hacer ni caso.

Pero si por el contrario, aplicas lo aprendido en la meditación. De pronto, ese algo y tú comenzais a hablar el mismo idioma. 

Y no solo eso, sino que donde antes había agobio ahora hay silencio. Yo que soy muy fan del silencio y el espacio... Estoy muy contenta últimamente. 

Así que voy a compartir las frases que más me han impactado de la lectura de Cunningham:

(Tras descripción objetiva de factores externos)

"Estaba a salvo."

"Uno de sus talentos era amoldar sus expectativas a su situación" 

 "Más breve que una nota negra" 

"Uno siempre podía contar con que llevara algo inesperado" 

"de haber tenido una expresión más lunar..." 

"Allá arriba las estrellas giraban (....) Igual que él orbitaba la casa de Jhonny" 
"Bares antiguos, hundidos bajo el peso de lo cotidiano" 

No sé si a mí de joven me impactó mucho "Rebeldes" o "El Guardián entre el centeno", pero a mí este tono literario me encanta. 

Si lo pudiera imitar, ¡ay! Si yo pudiera.