El ascenso de Skywalker (Star Wars: Rise of Skywalker)
No soy muy fan de Star Wars. Vi las primeras películas siendo muy niña, en Navidades. Era lo normal. La saga comenzó para mí con un tipo muy majo, que se lleva una buena paliza en un planeta de hielo, y que lucha sin parar hasta llegar a un épico combate final, con su padre, al que redime porque por lo visto la historia familiar era un auténtico drama...
De todo Star Wars, a mí en los ochenta lo que me gustaba era ver moverse esos robots gigantes de cuatro patas. Aquello me chiflaba de niña. Los robots sobre el hielo. Estos: clic Lo demás me daba un poco igual. Sabía que el contrabandista era un poco gamberro y el caballero con espada era bueno.
Luego vi la película mucho después y resulta que Han Solo no era... tan cardo como yo pensaba. De hecho, al crecer dejó de parecerme... "el borde no-protagonista" y pasó a ser "el canalla que encandila a la princesa". Y, cuando crecí más, ¡curiosamente me empezó a gustar más que Skywalker!
De repente se armó un gran revuelo porque alguien había decidido hacer las películas que iban antes que la saga original. Películas que el director no pudo hacer en su día, porque eran difíciles y costosas, pero que ahora la gran industria del cine iba a producir. Fui a ver la primera y no entendí por qué la trama era tan larga. Había un niño, vale, que me cayó bien de inmediato, quizá por ser un tipo 2 de personalidad, (eneagrama del "ayudador"). Me recordó mucho a Raistlin, de la Dragonlance, porque de niño era el personaje más inocente de todo el elenco. Es muy curioso como la inocencia, precisamente por ser así, suele acabar en personajes terriblemente malvados. Así que Ani consiguió mis simpatías desde el minuto cero. Un ser especial... con algunos problemillas para dominar sus emociones.
Pero no entendí lo de la carrera (se me hizo larga), me daba igual el odiado jar jar bings (como se escriba) y aunque Padme tenía mucha fuerza, ... me seguía faltando un héroe. La voz de Liam Nesson era, curiosamente, la del mismo actor que en su primer papel hacía de Skywalker, por lo que Qui Gon Jinn también obtuvo mi respeto. Sobre todo por su calma.
A Obi Wan no le soportaba. (Ahora vamos a ver esto).
Tenía en la mente al actor de otras películas (entre ellas, trozos de Trainspotting, así que a mí me parecía... un quinqui. Un tipo de los barrios bajos. Y sí, es verdad que hacía un par de chistes pero era tan apocado, tan neutro, que a mí no me gustó nada). Sin embargo, en la pelea final me cayó un poco mejor, curiosamente cuando mi hermano dice: "Esta muy bien, ¿te das cuenta de que pierde el control y por eso le derrota el Sith?" y yo: eeeh... sí... eeeh, claro.
La siguiente de Ani, me dieron ganas de tirarla al fondo de un río. La historia de amor de Anakin y Padme no había por dónde pillarla. Ella era tres veces más madura que él, y él se comporta como un niñato con arrebatos absurdos que alejaban el personaje del candor y la valentía iniciales. Por suerte, ahí estaba Obi Wan para convertirse en héroe. Y me enganché a Obi Wan durante un par de pelís más, y lo suficiente como para comprarme dos novelas. Alguien muy fan me dijo: "Él es un verdadero jedi, de hecho, el más equilibrado de todos. Tiene sentido del humor, sigue el código... si buscas un jedi que no esté loco o se enfrente al consejo, y que sea humilde, no como los demás... ahí le tienes a él".
Ah, contesté.
La saga termina, todo es un desastre, menos mal que el público sabe que tras ése final llega el principio que muchos vimos en los años ochenta y que todo va a ser bonito de nuevo.
Y ya está, se acabó Star Wars.
Una serie de años después, alguien decide hacer una nueva saga.
Y aquí es donde empiezan los problemas.
Hace muchos años, yo leí La Guerra de la Lanza, donde una serie de personajes pasan unas dos mil páginas luchando contra el mal y sus demonios internos. Entre todos los personajes, el líder eran un tal Tanis, al que vamos a llamar, el mestizo. Cuando esa saga millonaria terminó, algún lumbreras decidió seguir explotándola y sacaron otros tantos libros, en uno de los cuáles Tanis muere con una simple estúpida flecha lanzada en unas escaleras, por un orco anónimo (o algo así).
Seguir a un personaje durante dos mil páginas, verle superar guerras con dragones, derrotar demonios, conquistar ruinas repletas de orcos... y que alguien lo mate en una línea de texto... a mí me provoca la invariable respuesta de abandonar el libro. Eso no se hace.
Así que cuando me senté en el cine, vi unos personajes jóvenes que sin venir a cuento dominaban el arte de la espada jedi con tan solo empuñarla... y resultó que el malo de esta entrega era el hijo de Han Solo, y pensé: "¿Para qué han luchado durante tres películas enteras si resulta que sus hijos viven la misma guerra? ¿No es un poco absurdo?" y me enfadé y me desconecté del film. Pero todavía me enfadé más con la muerte de Han Solo.
Me enfadé tanto... que olvidé la película a los pocos días de verla.
Y, de hecho, no sé si he visto las demás, ni en qué orden. Sencillamente, dejaron de importarme. Sé que vi alguna precuela, sé que vi una segunda, o quizá una tercera, me olvidé de todo, salvo de la choza, la isla de Luke y ese momento estúpido en el que ella habla con él. Creo que ocurre en la película anterior a esta, pero si me preguntas de qué iba, te diré que no lo sé. Ni siquiera sabía el nombre de los personajes. Sólo recuerdo la isla, y a estos dos, hablando.
De las pataletas de Kylo Ren, mejor no hablar. Fue otra de las cosas de la primera que pensé que eran patéticas.
Pero ese momento de conexión en esa isla y en esa choza me dio cierta... vamos a decir "rabia". Me enfadé porque alguien como ella, hablara con alguien como él. Salí del cine y a los cinco segundos me había olvidado de toda la película.
No pensé ver la última.
-Ah, mira, Star Wars...
- ¿Sí?...
- Hemos ido a verla..
-Ya...
Ni caso. Dejé pasar los días sin tan siquiera enterarme de los horarios. ¿Para qué? Si no tiene ni pies ni cabeza... si ni siquiera recuerdo el nombre de los personajes... si es absurda...
-Nelly, hemos ido a ver Star Wars...
- ¿Y?
-Pues nos ha gustado bastante. Es entretenida.
hum.
"Entretenida". ¿Cómo puede ser entretenida una película en la que el malo es imbécil y a ella no hay por dónde pillarla porque no sabemos de dónde puñetas ha salido?
Cinco días después... y por una corazonada, le dije a un amigo de ir a verla.
Tiene varias cosas que hacen que esta película me llegue mucho.
La primera: está llena de fantasmas.
La segunda: está llena de guiños (por favor, ¡ese X Win saliendo del agua! ¡¡Cómo entrenaba Luke y no podía sacarlo y miradle ahora....!!)
Ese gran poder de la Fuerza.
Y lo que yo siempre pedí a una saga nueva: háblame de leyendas de los Sith, háblame de cosas del pasado.. no me metas a calzador una nueva guerra. ¡Que ya he vivido guerra con sus padres! ¡Y se merecían un poco de paz y felicidad!
Pero realmente, la batalla sobre el agua, es lo que cumplió todas mis expectativas siendo apenas la mitad de la película. Eso, Leia, la voz, y la cura... ese momento... y allá fue ... todo mi... ¿qué palabra uso? desprecio por Kylo Ren. Y en vez de desprecio... pues no sé cómo de alguna manera empecé a verlo terriblemente atractivo.
Y claro, suma eso a: te explico de dónde vienes. Te explico quién eres. Te digo que puedes elegir. Y una vez que eres capaz de comprenderte te digo a quién estás unida en la fuerza. Y ya, con esa unión y esas batallas... la que estaba enamorada de Kylo y de la chica era yo.
Casi lloro. "¿Cómo puedes llorar con una película de Star Wars?" me dije, sentada en la butaca: "¡qué vergüenza!"
Pero sí, con temas de uniones... lo llevo mal. Eso de tú estás allí, yo estoy aquí, pero en realidad estamos unidos y si doy un golpe tú ves lo que se desparrama alrededor... esas cositas, me tocan el alma sensible.
Y ese final....
Me dicen mis amigos: ¿pero de dónde se sacan eso?
Y contesto: ¿¿¿Perdona??? ¿¿¿No lo veías venir en la choza de la película anterior???
Yo sí, odiaba a Kylo por hablar con ella. Y la odiaba a ella por no darle una patada a Kylo y porque se ve de sobra, pero de sobra, lo que pasa.
Y mira, en la tercera, es que estoy enamorada de los dos.
Que sí, que es como el Viaje de Chihiro. Si te gusta Haku y Chihiro es imposible no enamorarte de estos dos. Es lo mismo.
Así que, ¿que si me gusta la pelí? Oh, sí. Bastante.
¿Que si tiene cosas forzadas? Pues claro....
¿Que si me gusta la saga? Pues curiosamente la saga no. A mí de estas películas sólo me gusta mucho el conflicto de Skywalker en la que muere su esposa (ya sabéis, profecía autocumplida), la pelea de Obi Wan cuando muere su maestro, la escena cuando lucha dentro de una nave y da un salto en medio de todos los malos (así, como si tal cosa...) y, sinceramente, esta última. También me gusta mucho la última pelea de Obi Wan con Anakin. La escuché en inglés tantas veces, que aprendí inglés con ella. Sobre todo cuando dice eso de "My allegiance is to the republic, to democracy!" y lo de "only a Sith deals in absoluts". Fijaros, usan "deal" como "tratar", sólo tal tipo de persona dirime, dirige, discierne, con absolutismos...
Luego viajé a Liverpool y la profe alemana de inglés que conocí allí no se creía que yo hubiera aprendido inglés en las películas. Gracias a Obi Wan sabía decir: "I don´t think so" y gracias a Padme: "Are you sure about this?". Es un poco triste, pero es cierto...
Creo que esta me la compraré y la veré en inglés... unas cien veces.
jajaja!
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