Volviendo del trabajo encontré un ramo de siempre vivas y decidí comprármelo, como regalo y para adornar el rincón de mi Budita.

¡! ¡Ahora tiene flores de verdad!!!!

He puesto una comedia. Son historias de amor en París. Es un poco surrealista pero divertida...

Llevo dos horas y media viendo esta película y no se acaba. He visto un vampiro, dos divorciados, un ciego enamorado de una actriz, un vaquero que era el que hace de Duende Verde en otra película, un mimo (esa historia ha sido genial)... Y a las 8 he dicho ¡basta! Que tengo que meditar.

Me siento frente a las siempre vivas, me pregunto por qué a veces estoy triste y otras alegre. Hago 3 hermosas dedicatorias budistas. Me centro en la tercera, "porque nos sentimos alejados de unos y cerca de otros"... Si somos siempre nosotros.

Silencio, silencio... De repente... El Muso no me parece humano...

Suena el teléfono.
Es mi editor.

Y colorín colorado, por hoy esta historia ha terminado.