¡¡No es justo!!
Queridos lectores, esto es para que veáis lo que "tengo que aguantar".
Me han cambiado de departamento, trabajo muy muy muy muy muy lejos del Muso.
Lo que está fenomenal, habida cuenta que no hay quien aprenda nada de él y que mi mente se vuelve loca y me ataca si lo tengo cerca.
Diréis, "Ah, pues muy bien, Nelly".
Tras estos once años de enorme fracaso intentando aprender budismo, me dije: "Ya está. No hay maestros, ni magia, ni ... nada".
Bien.
"Lees libros y haces lo que te de la gana"
Estupendo.
"Ese es el camino".
Hace no demasiado tiempo, puede que un par de semanas, quizá tres, me dio por comprar palomitas en el Supermercado. Pensando que no eran, dentro de los alimentos "malos", de lo peor que podía comprar. Bien. Resulta que me gustaban mucho y acabé comiéndome una caja de palomitas de micro-ondas cada tres días. Y esto: no se lo conté a nadie. Hasta aquí, ¿bien?
Nelly compra palomitas en el súper y no se lo dice a nadie.
Pasados diez días y comiendo cajas de palomitas a mansalva, me dije: "Yo no sé... si esto no será dañino, ¿y si son transgénicas?" Y ahí que durante un par de días, puede que tres, puede que más, me decía a mi misma: "te van a sentar mal tantas palomitas- te van a sentar mal tantas palomitas-..."
Sin contárselo a nadie.
A nadie.
Obsesión mía secreta.
Las palomitas. ¿Te pueden hacer daño?
Una de las últimas veces que vi al "Muso" y, pensando: "¿Ves? Un ser humano normal y corriente. Un humano, un hombre.. un mortal. ¡Un error! Es que te confundes en todo..."
De pronto el Muso va, ufano y sonriente, y dice en voz alta (sin dejar de teclear en su ordenador):
-Menganito, ¿dirías que comes muchas palomitas?
??????
-¿Cómo? -preguntó Menganito.
-Que si comes muchas palomitas de maíz -repitió el Muso.
Yo callada. Ssssh. Ni caso. Roja. Patidifusa. Perpleja. Ojiplática.
-Es que si comes muchas palomitas... te puede pasar esto.
Y yo pensé, para mis adentros: "¿¿¿Veeeeeeeeesssss???? Se llama C-A-S-U-A-L-I-D-A-D. Cosa que dicen los seres humanos y que parece tener relación con otra, o que la tiene, pero que es casual y no significa nada".
Y el lector podría preguntarse: "Vaya, Nelly, ¿y no te extrañó ni un poquito un comentario así cuando era lo que tenías en mente?". Nooooooo. Porque son once años de metedura de pata (Coso me pide que os diga que no son tantos...) y una ya ve que el error aquí es atribuir cosas a cosas que no son. El Muso dijo lo de las palomitas como podría haber hablado de campos de futbol. Da igual. Es casualidad.
Ocurre constantemente.
No tiene importancia.
Yo seguí trabajando. "Ni caso, ni caso" "es casualidad".
Hoy le he dicho algo, por escrito, y él ha respondido: "Así es, que así sea"
Vaya forma rara de contestar, pensé.
No dijo nada más.
En todo el día.
Me gusta escribir por chat. Es lo mejor. Está claro que no puede enseñarme nada. No somos compatibles.
100% seguro(s). 1000000% seguro.
NO hay enseñanza, no tiene nada que enseñarme. Ni yo que aprender.
Y llegamos al presente:
Esta tarde me pongo a leer.
Primero un relato de Roal Dalh, absolutamente maravilloso. Venía de tomarme un helado con un amigo y estaba encantada. Nada más terminarlo, saqué de la estantería El Señor de los Anillos.
Leía plácidamente pensando en lo maravilloso que es leer y lo mucho que me gusta. Hasta que Gandalf va y dice:
-Que así sea.
Y cerré el libro de golpe.
"Así es, que así sea"
Tengo un plan.
Veréis, yo puedo pensar en una frase secreta como: el viento en la muralla sopla hacia el Este y si me encuentro al Muso y me dice algo así como: "Muralla y Viento" o cualquier cosa similar, ¿sabéis lo que voy a hacer?... ¡Nada!
Porque aunque no lo creáis, es todo mentira.
Lo de las palomitas, las frases, los trucos, la magia, las cosas inexplicables por la ciencia son...
... son....
....casualidad.
Es como hoy, cuando íbamos todos conduciendo apresurados a primera hora de la mañana. Como locos. Y viendo un semáforo ponerse en rojo, ya en la distancia, me dije: "Mira, esto es absurdo. Frena y déjalos pasar a todos porque no se puede ir así, es que vamos todos como si esto fuera..."
Y va y cruza un camión por delante mío. En la caja, rotulado, pone:
CARRERAS
"¡Jajajajaja!"
Sí, exacto. Haciendo "carreras". Vi alejarse al camión y seguí conduciendo tranquilamente, se me abrieron todos los semáforos y dejé de encontrar obstáculos en el camino.
Pues eso, casualidad.
0 comentarios:
Publicar un comentario