No me ha funcionado.
Vuelvo a casa más triste que nunca, llorando y de verdad que lo único que deseo es no volver a hablar con esa persona jamás.
Gracias a Dios que va a ser así porque no es necesario hablar con ella (al menos a solas o hablar de verdad) nunca más.
😊 Y ahora a recuperarme y a cuidarme.
En verdad os digo que ojalá jamás nos hubiéramos cruzado. Que jamás hubiera confiado en ella y que jamás me hubiera dejado confundir de semejante forma. Que cuando sólo confiaba en mí era fuerte y ahora lo único que me causa es dolor. Y todo lo que me ha traído su camino es también dolor.
Y que lo único que he aprendido es que es la gente en la que confías la que te hace daño.
Y deseo de verdad que jamás vuelva a dirigirse a mí para nada que no sea una cuestión de gestiones, de esas que hay que hacer, pero ojalá nunca en la vida volvamos a hablar de nada, ni vuelva yo a confiar en él para nada, ni a creerle una sola palabra de lo que dice.
Ojalá Dios me mande un chubasquero para poder alejarme de él y ser invisible.
0 comentarios:
Publicar un comentario