Voy a darle una vuelta a los contenidos de blog (ayer pasé a borrador unas cuantas entradas). El motivo es que -aunque sea divertido y desde luego a mí me sirve de terapia-, luego lo veo demasiado intenso. Y aunque lo más leído han sido las entradas que nombran al actor (ya os vale, os gusta tanto como a mí...) y en cierto modo sigue una historia... creo que es mejor hablar de libros, de cine, de exposiciones... 

Al final debatir de filosofía con alguien acaba siendo como mirarse en un espejo (claro, el blog no contesta) y es como explicarte cosas a ti misma. Y para qué me voy a explicar cosas, basta con saberlas. Y si las sabes, no hay conflicto. Por tanto... mejor os hablo de libros.

^_^ Claro que como todo es tan novelable alrededor...

Pero no, ¡no! Las novelas son las novelas...