Hoy conduciendo me puse a pensar en algo referente al futuro. Y me agobié. Y me mi pensamiento era tal que así:

"Bueno, pues mira, ya está... haces esto, ¡y fuera! porque si va a pasar esto.. entonces...!"

Justo en ese instante sonó: CLANC!

Y no fue casualidad.

No lo fue. Os lo aseguro. Ya estoy tan habituada a cosas improbables que las reconozco a la perfección (jajaja, algo en mi interior hace que me de la risa).

El sonido fue igual que un latigazo me sacó de mi pensamiento super rápido y me obligó al volver al presente con lo que la sensación de agobio y aprensión sobre un futuro inexistente se desvaneció en el acto.

Miré a lo lejos, pues sabía que me había impactado una piedra en el parabrisas pero no había ningún coche delante. El camión responsable estaba en otro carril y a casi setecientos metros de distancia. El hecho que me hubiera alcanzado una china proyectada de su rueda en plena curva, en otro carril y con tres coches en medio... más que una casualidad, era un acto altamente improbable.

Estaba demasiado lejos.

Y sin embargo, así fue.

"Esta bien" me dije, volviendo al presente, "ok, me olvido de todo lo que pensaba. No actuaré en ese sentido..."

Y seguí conduciendo. 

"¿Pero entonces qué hago?" me dije a las pocas curvas.

Ayer aprendí algo que una buena meditadora debería saber usar más a menudo. Aprendí a conectar con una emoción. Primero me echaron la bronca por ser "hiper-racional", y ... luego me concentré. 

-¡Tienes un lado intuitivo altamente desarrollado! ¡Pero lo ignoras! 

Ya, bueno, una no puede ir ... mirando lo que siente a cada instante. 

Mientras conducía por esa carretera me dio la sensación de que ese lado emocional decía algo sobre el presente. A lo que yo repliqué con otra idea referente a cómo organizar la vida en cajas. A lo que ese lado ... menos habitual, me dijo: no he dicho que no vivas el presente, sino que lo vivas.

"Aaaah, ya" pensé.

Y seguí conduciendo.

Por cierto, me ha escrito el editor, ya me ha pagado el anticipo que me debía y mañana le tengo que llamar. Eso significa que el segundo libro... saldrá adelante (segundo de una colección sin firma, cuyo título hay que mantener en secreto).

Es un contrato de "negro literario". A mí no me importa, me cae bien el personaje principal. Y, desde luego, los libros son precioso. Tapa dura, ilustrados. Además, jajaj! a la joven protagonista le interesan unos temas parecidos a los que me interesan a mí. Aquí siempre hay dos partes, en mis cuentos, ¿verdad? la científica y el cartero. Bien, la prota... podría perfectamente basarse en uno de los dos personajes.

^_^

Dicho lo cuál, me voy al gimnasio pues tengo una bonita contractura en el hombro izquierdo.

Salu2!!!