^^ En el que sueño algo que me echa una mano...
Definitivamente, los sueños nos dan pistas.
Tras pasar una mala noche me quedé dormida y soñé con una bonita tienda llena de cosas para curiosear. Tenía dos escaleras y un ascensor. Pero el ascensor estaba roto, así que tuve que "saltar" para alcanzar un estrecho hueco que bien podía ser una ventana y traté de subir así al primer piso. Con el resultado de que me quedé atascada. Entonces vino una de las que trabajaba en la tienda y me dice. "Pero, ¿cómo se le ocurre?" y yo logré salir de aquel hueco estrecho en el que casi me atasco, y luego le decía a un personaje invisible: "A ver, si no funciona el ascensor y ponen eso ahí, ¡más de uno intentará subir usando el hueco!".
Lo gracioso es que a los diez minutos veo que una chica se queda igual de atascada. Y de nuevo baja una dependienta a ayudar y yo digo: ¡¡¡Lo ves!!!¡Otra a la que le ha pasado lo mismo!
Y entonces el sueño cambia. Y estoy en una casa y de repente aparece el "muso".
Nos poníamos a hablar y yo le invitaba a quedarse a cenar y le presentaba a personas de las que he aprendido cosas. Y estaba super-feliz. Pero le decía: "él opina esto de esto otro así que... no vais a estar de acuerdo pero yo le aprecio" y de otra persona: "esta opina esto de esto otro pero yo me río mucho cuando me enseña..." No sé, era como presentarle a mis referencias.
Se queda a dormir también, y de repente en mitad de la noche yo me despierto y pienso:
"ah, espera, ¿¿¿significa que me va a enseñar???".
Justo entonces llega una de esas personas que yo le había presentado y me da con la luz de la linterna del móvil en toda la cara.
- ¡¡Eh!! ¡¡¡QUE ME DESLUMBRAS!!-protesto-, ¡apaga esa luz!
Y al apagarla, veo que el muso está viendo en la tele, un programa de música de canciones japonesas.
-¡Deja de incordiar! -le digo a la otra persona querida-, ¡¿no ves que va a enseñarme?!
El muso se levanta y se va. Y yo me desperté. Me había mandado un sms al móvil. Y al despertarme... bueno, aquí está el quid de la cuestión. Creía que era real. Me desperté pensando: ¡¡uy, borra la entrada de la desconfianza que sí que te enseña sí que te....!!
Encendí mi móvil y allí no había ningún mensaje.
Y fue en ese preciso momento cuando lo entendí todo. Para mi corazón, esto es una ruptura. Sí, ya lo sé, no es... una ruptura cuando no hay relación en absoluto. Pero yo no digo como lo veo yo, sino como lo siento.
"ay" pensé, "otra vez".
Y además, me dolía mucho la garganta.
Yo tenía 18 añitos cuando lo pasé mal por una persona y desde entonces... no se me acerca lo suficiente nadie. Peero... sólo había que ver la reacción, la emoción, de buscar el mensaje de un sueño en un móvil real para darse cuenta de que una cosa es lo que yo le diga a mi corazón y otra en lo que mi corazón se empeñe.
"Vaaaale".
Activando el modo: "cuídate, bonita, que nadie más te va a cuidar".
Paso uno. Preparar un té con gengibre. Paso dos. Ducha de agua super-caliente. Paso tres. Mira que cielo tan bonito.
Paso cuatro. Meditar.
Sí, amigos y amigas, meditar cuando estas mal no es mala idea, y menos con rupturas. Sean ficticias o no. Esta es ficticia. No hubo relación, sólo confianza plena.
Esta bien, no pasa nada.
Me siento en mi cojín. Abro Internet. Pongo: "Reflexión para hoy".
Aparece esto:
No te enfades con el pozo que no da agua,
pregúntate por qué te empeñas en seguir yendo al mismo pozo.
¡JAJAJAJ!
¡AJAJAJAJ!
No puedo creerlo.
¿No había otra "reflexión para hoy, Universo"?
Ainssss.
Bien. Decido meditar con lo siguiente: "fíjate en lo que hay y no en lo que quieres que haya". Esa es mi idea. Se me ha ocurrido a mí solita. Estoy orgullosa.
A los quince minutos, descubro que el contacto de El Viajero, en el messenger, me sobra. ¿Por qué? Fácil. Tampoco él me va a enseñar. Por más que yo me empeñe en "este otro también sabe y seguro que me enseña y tiene que encajar en mi pequeño cuadrado de maestro maravilloso", él no me ve así, me ve de otra manera. Cuando me doy cuenta de eso, lo borro.
A los veinte minutos de escuchar el mundo, (la de pájaros que cantan hoy), se me ha pasado el dolor de cabeza, la falta de energía, la tribulación... y hasta he tenido tiempo de sentir algo bastante curioso (yo lo denominaría quizá angustia pero no lo tengo claro. ¿Alguna vez habéis sentido algo que va como desde el pecho al ombligo pero que no sabéis poner en ningún lado físico del cuerpo? Me refiero a que parece que está delante del pecho y el ombligo, más o menos como a un palmo, en un lugar que se supone que no deberíais sentir. O quizá sea sólo una ilusión del cerebro). Bien, en vez de salir huyendo, y dado que lo sentí con un mudra que para mí es bastante efectivo, volví a él y observé la emoción. Tampoco era para tanto.
La alegría también se siente ahí. No sé, es todo muy raro.
A los treinta y cinco minutos de meditación decidí que era realmente efectiva fijarse en lo que hay y no en lo que quieres que haya.
Y luego me terminé mi té (frío), me senté a escribir, corregí dos capítulos ya corregidos que son la caña y abrí la página del editor al que quiero mandárselos. No lo he dicho (no puedo) pero tengo un título más en el mercado (por favor, Davidel, si me lees no digas cuál es) y que es maravilloso. Es un libro... maravilloso.
Pronto saldrá uno del espacio (se supone que en otoño)
Y luego está esta novela "del muso" que ahora tiene una dedicatoria de desamor y unos personajes que jajaja! van a tener drama... para rato.
^_^ No creo que salga, no lo sé. Pero al menos me sirve de desahogo.
Saludos!!!
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4 comentarios:
Si, te leo. 😁😁😁
Es curioso lo que has dicho en el sueño... "A los diez minutos veo que una chica se queda igual de enganchada" supongo que lo has dicho por decir, el tiempo me refiero. O te pareció realmente diez minutos? Lo digo por que no existe el tiempo o digamos...es diferente. Tu que opinas?
Me gustaría compartir contigo una experiencia que pudiera tener similitud a lo acontecido con tus "no maestros". Cuando hice un máster en interpretación (un curso después de la carrera específico) no termine muy contento. Pues a lo largo del curso hicimos muchas cosas y nos enseñaron los mejores directores de casting del país... Pero no me encontraba preparado, en realidad pensé que en todo el curso no me habían enseñado nada. Pasó un tiempo, un mes o algo más, e hice varios casting para televisión y teatro...y de repente me di cuenta de que habia aprendido muchísimo. Me salió genial, al menos yo quedé muy contento e impresionado. Había aprendido, pero hizo falta salir de esa vorágine para estabilizar mi cuerpo y mente y ver que realmente habia aprendido. Quizás pueda que te pase esto a tí, si estas durante un tiempo alejada de esta vorágine de pensamientos.
Que tengas un buen día desde Vitoria!!
madre mía, qué casualidad!!! David, guarda gran relación eso que me has puesto con la entrada que voy a escribir ahora! jajaj! No si al final... jajajaj! Jo, gracias por compartirlo.
Ahí hay magia 😁😁😁
😁❤️
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