Sueños que son historias - El coche

Muy bien. Estoy enfadada. Ayer escribo un precioso cuento donde decido meter un coche eléctrico, y voy y tengo este sueño por la noche.



Salía de casa muy temprano para ir al trabajo y de repente, en una rotonda por la que pasó todos los días, el coche se queda parado, se le apagan las luces y parece que hay un fallo de energía. Se queda parado justo al lado de lo que sería el círculo interior, solo que esta rotonda es un poco especial porque la atraviesa un carril muy grande de doble sentido (es una de esas rotondas que circunvalan una gran calle).

Me pillé un cabreo... El coche con las luces apagadas, no arranca, comienza a oler un poco a quemado. Salgo del vehículo y me pongo muy nerviosa, mientras aviso a todo el mundo: al del seguro, a mis compañeros de trabajo, a la familia, al Muso... le mandé como 4 mensajes. Entonces se acerca un policía:

- Señorita, ese coche no puede estar ahí.

- No, si ya... -respondo-. Pero es que se me ha parado.

- Este carril es para otra cosa, no puede estar ahí -repite-. Ese coche no puede quedarse ahí.

- ¡Oiga, que se ha parado! -me enfado-. Estoy llamando a la grúa. ¡No arranca, cómo lo voy a mover!

(y llamando a mi jefa, con lo temprano que era... dudé en hacerlo pero recordé que otros compañeros lo hacen cuando les pasa algo. Con ella no conseguí hablar. Y menos mal, porque no era necesario molestarla)

- Señorita, este carril es para el desfile -me dijo, señalando la vía de dos sentidos-. Ahí no se puede quedar. Muévalo.

Y vuelta. Además, ¿¿qué desfile?? No había ningún desfile. Era una calle normal. Por ahí paso yo todos los días. Unos coches van, otros vuelven. Nada más. ¿Qué desfile pasa a las seis de la mañana? Miré el coche apagado del todo con cierta tristeza. Porque.. no es que estuviera "apagado" es que... estaba apagado de una manera.. muy rara. Daba como pena. Como cuando sabes que algo puede ser muy bonito pero no lo muestra porque está durmiendo o quieto (por ejemplo, no sé explicarlo de otro modo).

Por fin llegó la grúa (también llamé a mi familia). La grúa lleva el coche hasta un bar donde yo desayuno algunos fines de semana (comienza a amanecer, me he despertado justo a la hora que era dentro del sueño, lo que me lleva a pensar que lo he soñado en tiempo real, tiene tela la cosa...). Entro el bar y pido un café mientras espero al mecánico.

Y entonces me doy cuenta de algo. "Ay va! Pero si yo hoy he cambiado el turno!"

Efectivamente, no tenía que ir por la mañana.

Y es aquí donde el sueño se convierte en pesadilla. Le había mandado mensajes a todo el mundo, y yo no tenía que entrar hasta la tarde. Qué vergüenza. Abochornada, no, lo siguiente.

- ¡¡¡Ya es casualidad!!! -exclamé.

(Encima, eso jajajajajaj!! Las dichosas casualidades)

"Se me ha estropeado el coche justo el día que cambiaba el turno". Me imaginé, porque siempre lo hago, que habría resultado de no producirse el hecho y visualicé toda una línea argumental diferente: yo llegando al trabajo, mis compañeros partidos de risa porque he ido cuando no es, y el consiguiente cabreo. Pero en vez de eso... las cosas habían transcurrido distintas. Y todo por una casualidad. 

Justo en ese momento llega el mecánico y yo me voy a casa con un ser querido. A esperar. Al cabo de un rato, el mecánico llama a la puerta.

- Bueno, ya lo tiene usted resuelto -me dice.

- ¿Ya? -pregunto.

- Sí, no tiene ningún problema -me contesta el mecánico-. No hay ninguna avería.

- ¡Pero si se paró! -contesto-. ¿Cómo no va a tener avería si le falló la energía? ¡No arrancaba, se apagó, olía a quemado! -le digo esto último con énfasis. Nada que huela a quemado puede estar bien. Seguro.

- Lo que pasa es que lo lleva usted como si fuera un todo riesgo -me dice, ojo a la frase que no tiene ningún sentido pero es literal-. Y ese coche no necesita ir así. Ese coche tiene que ir más ligero. Tiene que ir usted más a lo esencial, ¿ lo entiende? 

- ¿Le ha quitado cosas a mi coche? -pregunto indignada. Bueno, bueno,... 

- ¡Oh, sí! -contesta el mecánico-. Le he quitado esto, aquello... (dijo nombres de cosas, no las recuerdo). Y ahora va como la seda, tiene energía suficiente para ir de maravilla. Lo he arrancado, está perfecto. 

Miré el reloj. Ni siquiera tendría que haber molestado a los de la oficina, ¡faltaban horas para ir al trabajo! 

Y me desperté.


En fin. Así que llevo el coche (mi coche tiene 19 años y es muy pequeño, tiene 56 caballos pero todos pura sangre) como si fuera un "todo riesgo" ¿eh? Qué puñetas querrá decir eso si yo solo  tengo asegurado un terceros jajajaj! "Lleva el coche como si fuera un todo riesgo" ¿se refiere a impecable?
Por cierto, veo que la temática de los sueños ahora son los coches. Hace unos meses: las casas sin fin. Ahora va de coches: coches en los anuncios del periódico, coches que se apagan en las rotondas... 

Bah.

Saludos!!!

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