Sueño raro

He tenido una terrible pesadilla. 
Resulta que estaba en mi casa y llamaba a la puerta un extraño. Pero era tarde y la puerta estaba cerrada. A pesar de eso, el pesado que se empeñaba en entrar volvía a llamar. Y trataba de saltar por una ventana, por lo que me dediqué a cerrarlo todo a cal y canto. Y ya no era un solo pesado, eran muchos.
Era de noche, todo estaba muy oscuro... daba mucho miedo.
Como insistían en entrar, grité: "¡Voy a llamar a la policía!"
Los golpes se repitieron.
Esta bien. Levanté el teléfono... me contestó una voz extraña. Y yo le dije que vinieran rápido. Que unos ladrones querían entrar en mi casa.
Bien. El desconocido me contestó pero... esto es terrible. Su voz no era humana. Daba muchísimo miedo... muchísimo y parecía burlarse de mí. 

Me desperté espantada

Pero espantada. No os imagináis. El caso es que me quedé inmovil en la oscuridad y pensé: "Esto no es más que un síntoma".

Estoy mal desde el jueves pasado, no voy a negarlo. Aunque, por extraño que parezca, tanto el trabajo como la novela... van fenomenal. Pero yo no estoy bien. 

Lo que sí me ha gustado es que enseguida pude considerar ese sueño tan terrible un mero síntoma de estar mal. Pesadillas.  Pues vale, pues sí, es lo lógico.

Bueno, a ver si esta noche puedo soñar con flores.


Posdata: sé lo que alguno estará pensado: ¿y que te pasa? Respuesta: nada.
No me pasa nada.
Simplemente no estoy bien y ... de eso que te encierras un poco (¿¿un poco?? jajajaj) en ti misma y ya está. Bueno, vale, sí, vale. Un mucho. ¿Qué más dará? En serio, qué más dará... pues ya está. 
Hala, ea!
Saludos y buena semana =) 

6 comentarios:

David Hernando (Davidel) dijo...

Pues nada, a esperar que se vaya esa emoción tan fea y hale. Habrás soñado eso tan terrible por como te encuentras tú. La próxima vez abres la puerta y los recibes con pasteles y té, ya verás como cambia la cosa 😂 yo a veces es lo que he hecho en mis sueños cuando son así de similares, me río y cambia todo. Bueno pues esta noche a soñar con los angelitos (morenos, de grandes alas y musculados) y les invitas a un té o lo que surja jajaja.
Saludos!!

Nelly dijo...

Jajajaj!! Té y pasteles?? Jajaja...no no ni de broma. Qué miedo

Manuel Delgado dijo...

Nelly, qué te voy a contar, la vida es una montaña rusa. Unas veces se está mejor, otras peor. Y es muy curioso que en escenarios así tanto el trabajo como otras actividades absorbentes (por ejemplo escribir) no se ven tan afectados. Es como si nos sirvieran de refugio o de válvula de escape.

Hace poco he aprendido una técnica muy útil extraída del mindfulness o proceso de intensificación de la conciencia en los procesos vitales. Uno de los ejercicios de meditación sobre el que he leído propone visualizarse a uno mismo en un prado mirando al cielo diurno, mientras se suceden claros y nubes. Algo así sería nuestra vida emocional.

Pero lo más importante de esta visualización es que los problemas, y en general todo aquello que nos preocupa, adquiere la forma de las nubes. Vienen flotando y se van flotando. Y más importante todavía: aunque son parte de nosotros no son todo lo que somos, no nos definen (no nos encierran, no nos agotan en cuanto a significación) y por tanto podemos distanciarnos de ellos y tomar una perspectiva más completa y saludable. Esto no es otra cosa que el objetivo final de la toma de conciencia activa que persigue el mindfulness.

Podrás ver que este tipo de ejercicios busca todo lo contrario de que te encierres: mirando hacia dentro eres capaz de mirar lo externo con otros ojos y abrirte más si cabe.

Si quieres saber más sobre este tipo de técnicas (yo estoy todavía explorando) te recomiendo una opción muy asequible: "Mindfulness: guía práctica" de Dann Penman y Mark Williams. Ed. Planeta 2016.

Espero que tus nubes pasen pronto. ¡Mucho ánimo!

Nelly dijo...

Muchas gracias 😊 Sigo unos cursos de budismo on line.
Esos también hablan de que cuando la mente se centra en el problema se cierra mientras que si te paras a pensar en que muchas personas sufren como tù y pides por todas...se abre.
La tristeza se me pasará pero lo que me asusta son las creencias. Todos tenemos creencias bajo nuestros comportamientos. Y la mayorìa no las expresamos con palabras. Son cosas que das por sentado. Cosas sobre el mundo.
👀 en fin.

Otra teorìa es que toooodo es quìmica.

Saludos y gracias x comentar.

Manuel Delgado dijo...

Con respecto al Budismo, te recomiendo un estupendo "backgrounder" firmado por Cambridge University Press en castellano: "El Budismo", Harvey, Peter. ISBN 8483230143. En una única referencia puedes encontrar los principios básicos de todos "los Budismos", así como su evolución histórica y geográfrica. Desde los postulados originales hasta las particularidades del Cánon Pali, el Cánon Chino y el Cánon Tibetano, cuando terminas el libro eres capaz de captar sutilezas conceptuales entre los postulados de las diversas escuelas, desde la Theravada a las diversas corrientes del Mahayana.
Con respecto a las creencias, precisamente lo que persigue la meditación autoconsciente es hacer salir todo aquello que damos por sentado, hacerlo visible y cambiar nuestra forma de ver para poder actuar en consecuencia.
En cuanto a que todo es química, es cierto que el mundo de la materia es química y es física, pero el ser humano es mucho más: siempre sujeto a las limitaciones de su "ser-en-el-mundo" va más allá de lo que le tenía preparado la Naturaleza y se hace a sí mismo sin llegar a estar nunca terminado. Es pura intención y transformación en libertad en un mundo de caos químico.
¡Ánimo y feliz semana!

Nelly dijo...

¡Madre mía! ¡Cuánto sabes! Tomo nota del libro para las Navidades. Lo buscaré...

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