El susto de Max...

Hola. Me llamo Max. Y soy la mascota de Nelly. Tengo un añito y medio, y soy muy juguetón y ruidoso. Aunque hoy he tenido un día muy duro.


Esta tarde cuando Nelly ha llegado a casa me ha encontrado tirado en el suelo de mi jaula, panza arriba, sin aliento, y ha pensado "¡Oh no, Max ha muerto!"


Le he dado un susto tremendo. Normalmente me habría levantado a saludar pero, ¡tenía tanto calor!. Cuando Nelly se ha acercado, al ver su cara preocupada, decidí incorporarme. Entonces ella cogió la botellita que utiliza para lavar y regar las plantas y me dio una pequeña ducha. Mmmmmh, agua fresquita. Pero como no habla "ratón" y no sabe que a los hámster también nos gusta darnos baños, enseguida ha parado y me miraba preocupada. He tenido que acercarme y ponerme debajo de la botellita para que ella siguiera refrescándome.


Después, mi dueña se puso a hablar por teléfono. ¡Cuánto hablan estos humanos! Los ratones lo hacemos muy bajito, y claro, no nos entienden.





El otro humano le ha dicho a Nelly, sabiamente, que no debe dejarme en la terraza. Pues aunque ella cree que me gusta estar junto a la ventana, algunos días hace demasiado calor.


Tras esta aventura me ha regalado un trozo de zanahoria fresca, ¡y algo que no había visto nunca! Ha metido en mi jaula una golosina, como los tronquitos que tengo para roer, sólo que al acercarme ¡se me ha quedado la lengua pegada! Y tras morderla, ¡se ha convertido en agua!

Lo ha llamado "hielo".

¡¡¡Mmmmh, ahora me apetece un helado!!!
Firmado: Max.

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