Se trata de la Cueva de Tito Bustillo. Tan antigua como Atapuerca y uno de los yacimientos más importantes del mundo.

Esta cueva de tres kilómetros de profundidad, es una caverna amplísima, llena de estalactitas gigantes, estalagmitas asombrosas, pasillos con restos de Osos Cavernarios, y grutas dedicadas a representaciones sexuales tanto masculinas como femeninas de los hombres del paleolítico.

¿Sabíais que se encontraron los mismos símbolos en esta cueva que en otras de Francia, y de lugares mucho más alejados de Europa? ¿Sabíais que los animales no son la caza sólo, sino un lenguaje muy difícil de interpretar?

Hay una zona para animales raros, en la que los habitantes de la Cueva dibujaron una ballena. Y una zona para los animales peligrosos. Sin embargo, parece ser que en todas las cuevas hay una pared en la que siempre se pintan animales "buenos", que simbólicamente suelen ser bisontes, caballos o renos, como en este caso. Porque por la época Ribadesella, que es donde están las cuevas, tenía un clima similar a Noruega. Y había renos.

Meterse en esas cuevas es como adentrarse en otro mundo. Uno muy oscuro y lleno de misterio.

Están fabricando la réplica de las pinturas porque, al igual que ocurre en Altamira, el propio CO2 que desprenden las personas las dañan. Estoy orgullosa de ser una de las que ha podido visitar la cueva original y os invito a que hagáis lo mismo antes de que las cierren, si tenéis oportunidad. Estar allí dentro, explorando pasillos y corredores con paredes pintadas hace quince mil años, y rodeados de ése silencio hueco, roto solo por el ruido de gotitas de agua al caer... pone la piel de gallina.

¿Sabíais que hay una cueva en Francia dónde hay huellas de neandentales? Esa no está abierta al público. Pero hay otra sumergida, también en Francia, donde en la zona de "animales buenos" no solo hay pinturas... sino también la mano de un niño pequeño grabada. A tres metros del suelo. De lo que se supone que su padre -o alguien-, lo alzó para que dejara allí su huella...

Impresionante. Es una lástima que estos tesoros sean "vedados" a los ojos del común de la gente, por su conservación. Aunque como nos dijo la guía: "las cuevas podrían estar abiertas mucho más tiempo sino fuera por los que no se comportan adecuadamente cuando las visitan."