Estaba super-distraída con una discusión por una cosa mala que pasó ayer y empieza a sonar el teléfono.

Es el Actor.

¡¡Anda!! ¡Es verdad, quedamos en hablar hoy!

Empiezo:

-Blablablalmfñlk asjflkadjfklsdfjasgjsdñglfkañsfjsa-kjas.ajklfjasdk am.gklasjg.aj

El actor escucha.

Todo lo malo en lo que estaba metida se borra de mi mente. Sigo contándole:

-Y aslj glaskjdfñkasdjflasdjkfñsdklfjkasdl fkjsdajfsadflksdj fsdfkljfklasjdfsdkf

Ríe.

-Y añsldfjkaskldfjñsdlfuañiodfsdkfñnasddfjñasdfjñasikfjasd-fkljasdklfjasildfuñasdfjasdklf.

-Ah, pues yo vengo de allí -contesta.

Risas...

-HYñ asif saldfjasudfñasiofj sdlfjasdkf.asdfsl dfj-asñl f safksdñfj sdñ-fl

Tomo aire y a toda velocidad le cuento el resto lo más rápido que sé y acabo:

-Y esos han sido los últimos... no sé, 9 meses de mi vida.

-¡Jajaja! Vale... de esto te digo lo que pienso: es lo peor, no puedes ****. Te entiendo, sé que lo estás pasando mal. De lo otro, me lo dijiste, que querías *****. ¡Jajaja! Pues yo estoy con esto a tope... y ahora estoy con esto otro. Y esto, ¡es una pasada!

-Enseñameeeeee.

Me enseña.

-Te va a hacer un informe, (ríe)... Anota la página.... A ti te sirve para...

¡Uy, qué cosas dice, si además hay algo que no le he contado!

-Mi amiga literaria: añlskjf lsdakjfñksdljf sdklfjñsdklfjasdoiñf jñsdkf askldfhas diofñl jsafi. Pero lasdj falskdjfaslfjaskiofjasd-kfljasdiñofuas jdfklsdfñioas. Y entonces alasjkd ñklasdfjasdklfjsad . Y yo a´s fjasdklfjslñajflsdajflska.... 

Se ríe.

-¡Claro! Es que funciona así. Ella sin editor, ¿no?

Le pregunto por su trabajo, le indico que mi compañero al que admiro ha estado ayudándome, se alegra. Le cuento más cosas, pero tiene que trabajar (te está prestando una atención en un tiempo para él de gran estrés y sin embargo, te ayuda) y nos despedimos. 

Resulta complicado narrarle un año de vida en 16 minutos. Pero me ha dado tiempo y a su vez él ha narrado dónde están sus amigos, qué hizo ayer, en qué trabaja y qué está preparando.

Estaba tan triste por las cosas laborales y otros menesteres que su voz y el ratito de charla me han devuelto ¡la alegría! 

=) ¡Qué bien!