Me prestaban una cámara de vídeo, estaba en la oficina, me ponía en pie y decía a todos:

- ¡Bien, vamos a iniciar esta propuesta! Y qué mejor que inaugurar este espacio de filosofía, donde vamos a abordar temas relacionados con la identidad, la libertad, la naturaleza humana, la sociedad, que comenzar (a petición de un compañero) con esos dos mensajes que salen en dos famosas películas. Uno de ellos es:....

Dicho esto y tras iniciar un interesante debate, busqué respuesta entre mis compañeros.

Y un poco después, sonó el teléfono de uno de ellos. Ese compañero protestó y le dije: "¿qué te pasa?" y me dijo: ¡Pues que ya está otra vez! Y le dije: ¿quién? Y me pasó el teléfono.

Era un tipo muy oscuro. Que parecía saberlo todo.

- ¿Qué hacemos, Nelly? ¿Llamamos a la policía?

Tomé en la mano el móvil.

- ¿Diga?

No recuerdo lo que decía. Hablaba de cosas sin mucho sentido. De dónde iba a estar cada uno. Y de dónde había estado... cada uno. Antes.

Busqué a ver dónde estaba él. (¡¡¡jobar, qué susto!!! jajajaj, sonó un ruido en casa).

Como decía... busqué entre el público, y mis compañeros, a ver dónde estaba él. Me pareció distinguirle.

- ¡Eh! ¡Eh, oiga! -era un hombre que daba la espalda a los demás, y se alejaba hacia un portal oscuro.- ¡Eh!

Le devolví el móvil a mi compañero:

- ¿Desde cuando pasa esto?

- Desde hace meses -me dijo-, siempre está hablando de todos. De dónde estas tú...

- ¿¿¿YO???

- Claro, nos llama a todos.

¿¿?? 

Miré mi teléfono móvil. Pues yo no tenía llamadas.

Ah, espera... tengo filtro de bloqueo de números.

Pero, ¿quién es este personaje? 

- Por eso no me ha molestado -dije al compañero-, mira: tengo llamadas en lista negra. Esas no se ven. 

(esto es real, tengo números de publicidad).

La duda era la siguiente: "¿quiero saber....o no quiero saber? ¿Quito el bloqueo a los números?"

Y te molestará a ti también. 

Me desperté.

Ya sé de qué habla este sueño. 

Este sueño habla de la elección entre implicarme en cosas molestas o mantenerme "a salvo" y pasar de ellas.. 

¡Qué gran cuestión!

Y yo hablando de filosofía y letras... ¡jajaja!