Una cosa muy extraña.

 Buenos días, Internautas:

Yo iba a titular esta entrada: La señora Smila y su especial percepción de la nieve. Por dos motivos: el primero, he dejado de lado el viaje de Frodo (ya lo leí varias veces) para empezar este libro que me regaló la biblioteca (expurgos). ¿Veis qué palabra tan rara?.... Ex-Purgo. Yo no sé qué significa pero al estar en una cesta con libros que desechan se me ocurre algo así: (dícese de material oficial del estado clasificado para su ****) y la palabra final sería "desechar", o... no es exacta, quizás sería "descarte". Con lo cuál ese término quedó asociado a biblioteca/catálogo oficial público.

Y me lo he empezado a leer. Me gusta mucho la protagonista y eso que ha dicho solo dos palabras:

-Una forma un tanto rara de jugar, ¿no le parece?

Ese párrafo (teniendo en cuenta que sé que existe una película del libro y me parece...sin saber aburrida y fría) pues me capturó la atención de una manera que hasta me hizo reír.

El policía contesta: ¿Y cuál es la forma adecuada de jugar?

Y ella dice: Cuando usted era pequeño y jugaba en los tejados... ¿lo hacía corriendo en línea recta?

Claro, ese chiquillo está escapando de algo. Yo lo sé. Y ella no es tonta. Total, que pensé leerme el libro. Y contároslo. Pero luego me dije "tampoco tienes que contarles cosas tan sencillas". Y con mi compañero metido en la cabeza (el compañero no clasifica sus horas tan estrictamente, el compañero fluye más, el compañero no le cuenta a todo el mundo cada mínima sensación, el...) lo cuál me llevó a: "La humanidad no hace esto..." 

Me levanté de la cama, dejé el libro en la mesita y me dije: "Pues voy a meditar".

Porque él compañero no planifica las cosas hasta el mínimo detalle.

Y aquí viene lo raro. No me vais a creer.

Mirad, yo ayer a las 18:30 (jajajajja, jajajajajaj ya veo por donde va esto) cené. Diréis, ¿a esa hora? ¿Como los ingleses? A ver, internautas, en primer lugar, como muy temprano. Ya está, es mi costumbre. Con lo cual a las siete llevo mucho sin comer y tengo hambre. En segundo lugar, me salté todas las buenas pautas de alimentación (o casi) y en tercero, me dije: buah, pues ya que tienes puesto el cronómetro, lo pones a cero y así no comes más hasta mañana y harás uno de esos "ayunos" tan de moda.

Ya sabéis, gente que pasa doce horas sin comer. 

Si alguno ha leído Los Recreos del Pequeño Nicolás, el capítulo del reloj... debe saber que soy yo. Mis padres aún se ríen: "Desde ese día, las cosas no ocurrían por la mañana, ocurrían a las 11:03 y 26 segundos...." Lo mismo del niño en el libro me pasó a mí. Y todos se ríen mucho pero yo no le veo la gracia. ¿A mí qué me contáis? De repente tenemos un instrumento que mide la hora exacta. No sé, aunque solo sea por curiosidad... 

Total, volvamos al presente. Esta herramienta tan maravillosa la uso para la meditación formal del compañero. Me dijo que meditara formalmente y yo... medito. Veinte minutos. Con cronómetro.

A veces, me paso uno poco.

Así que a las, jajajajaj... 23:02, tras contaros la entrada anterior, me senté a meditar. Miré mi reloj cronómetro del móvil y en el reloj ponía:  Tres horas y cuarenta y ocho minutos.

Bien. Lógico, ¿verdad?

Con fastidio, pensé: "Buah, ¿y ahora qué? ¿Lo pongo a cero?" y me dije "No, no, espera. Si quieres medir el tiempo sin comer y ahora lo necesitas para meditar, haz una cosa: cuenta veinte minutos y listo. A las Cuatro Horas y 8 Minutos serán los 20 de meditación.

Correcto, ¿verdad?

Vale, pues ahora viene el milagro raro. Lo hice y me fui a dormir. El móvil protestó con que no tenía batería. Vi un par de vídeos con los cascos y me los quité y dejé el móvil en el suelo (con cascos) y me dormí. Yo pensaba, internautas, que había parado el cronómetro. Porque una de las cosas que pensé fue: "Otra vez sin batería, vas a tener que cambiar de móvil... o se está estropeando o es que no puede con algún programa. Ya sea la ubicación, ya sea... ¿será el cronómetro?"

Yo pensé, internautas que lo había parado. "Mañana tienes en cuenta que hoy ha contado 4 horas y listo. Le sumas cuatro horas a tus horas de dormir..." 

Esta mañana, al sentarme a meditar, y tras cargarlo porque estaba muerto, encendí el teléfono y al sentarme para meditar y abrir el cronómetro vi que seguía andando.

¡Anda! ¡Qué alegría!

¡Pero si no se ha parado!

Desde ayer, desde ayer a las 18:30 horas (ayer) y son las 10:00 horas (hoy)... no se ha parado. 

-¡Mira qué bien! 

18:30 a 24:00 son.... 5 horas y media.

Y hoy son las 10:00 horas.

Así que han pasado 10 horas más 5 horas y media... ¿estamos todos de acuerdo?

Bien, ¿alguien puede explicarme esto?:



Por favor, ¿¿podéis explicarme por qué mi cronómetro... lleva 26 horas de conteo temporal... si lo puse ayer a las 18:30 horas??

Miradlo bien.

Yo lo llevo mirando un rato.

Funciona bien, esta midiendo tiempo.

Pero que yo sepa... para llegar a las 24... ahora mismo tendrían que ser las 18:30 horas. Y no lo son, ¡y no solo eso! ¡Es que marca 26 horas!

¿¿¿Veis??? NO me vais a creer. Y yo aunque se lo dijera a mi compañero... me diría no le veo nada de raro. 

Y entonces ya me vuelvo loca del todo.

¿Mientras dormía.... mi móvil ha... contado más tiempo del que ha transcurrido?

No, si ¡ni Einstein! me lo podría explicar... ¿Y sabéis qué? ¡Que es otra cosa absurda más hecha para tocarme las narices! Será.... pues yo que sé... que se ha desconfigurado el microchip medidor... pero que ahora funciona... pero que al dormirme yo no... o.. jajajaja, una vibración atmosférica. ¡No es justo!

Primero... peces en charcos, luego... la teoría de cuerdas y ahora el Tiempo!!!!

¿Es que no hay forma de respetar las cosas tradicionales?

Además, esto burla mi manera cuadriculada de medir las cosas. 

Bueno.

No podré averiguarlo porque yo no construyo relojes ni entiendo de sistemas operativos de Android. 

Voy a mirarlo otra vez... ¡jajajajaj!

Vale, ahora lo entiendo aún menos. Las últimas cifras se mueven al son de los segundos. Ok. Por tanto, el 57 son minutos. (Ahora ha avanzado la cuenta, lógicamente, pero es para que lo podáis ver en la foto)

¿26 son días?

¡¡¡En una noche!!! ¿¿??? ¿26 días?????

¿Me he llevado el móvil a otra dimensión y cuenta días????

¡Jajajajajaj! 😉✨ ¡Jolín, pues sí que me cunde el tiempo!


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