Leo


Hace unos días abandoné el libro de La Guerra de los Espejos y empecé uno de Mary Higgins Clark. Se titula En legítima defensa. Trata de una niña que intenta defender a su madre de su padrastro, pero ocurre un accidente, la madre muere (la niña dispara) y el padrastro casi muere también. Ella es acusada, la absuelven, se muda, se cambia de nombre, contrae matrimonio, se divorcia, se casa de nuevo, tiene un hijo y su segundo marido... decide comprarle una casita en Nueva Jersey como regalo de cumpleaños. ¿Y sabéis qué casa le compra?... Pues la misma en que ocurrió el suceso cuando era niña.

La novela está bastante bien, tiene un ritmo ágil, la trama avanza rápido. Y sospecho que no está en esa casa por casualidad, yo creo que el marido sabe algo (o quizá no, pero es muy raro que termine ahí)

También escuché por la mañana un directo de mi amigo de Canarias. Me encanta oírlo porque tiene una voz maravillosa y además nos conocemos en persona y es una persona muy abierta, que sabe mucho de la vida, generosa y humilde. No tenía pensado prestar atención prioritaria al audio pero comenzó hablando de la depresión y... algunas frases.... captaban toda mi atención. Él miraba a cámara y decía: "A nadie le pasa un tren por el sofá. Hay que salir a buscarlo." En realidad, él estaba contestando a los que habían visto el vídeo en directo (yo no pude). Luego dijo también: "Si estás esperando a estar preparada para ser madre, ... no tendrás nunca un hijo. Lánzate, pero lánzate ya, y luego las cosas ya irán saliendo." Y sonreía. Y luego dijo: "Yo a un psicólogo le pido esto .... pero, sí, como dice XX, comprensión te pueden dar tus amigos y apoyo, también" (yo antes creía en los psicólogos y ahora, francamente, no. Y os lo digo tras preguntar a psicólogos e ir a psicólogos. Lo siento, demoran, demoran... y nada cambia. No son efectivos para mí).

El resto del día pude hablar con otros autores, arreglar temas relacionados con libros y empezar un proyecto nuevo, si bien primero tengo que plantear el argumento porque me impacienté. También aproveché para descansar y para hacer ejercicios de matemáticas sencillos y un poco de entrenamiento mental. 

Os voy a contar una cosa curiosa, decidí retomar los ejercicios del "Brain Training" porque quiero ser ágil en cosas muy cotidianas, como calcular el cambio de la compra. Pero es que vengo notando que el ejercicio de signos matemáticos lo completo en 23 segundos y lo más extraño de todo es que no pienso lo que estoy haciendo.

Diréis: hombre, tendrás que calcular. Pues no. 

Yo contesto al tun-tun y está bien. Pero no hago el cálculo. A veces, sí, pero otras... es como si el cerebro pasara por un automático y he puesto el símbolo (más/menos/división) antes de leer mentalmente. Es decir: yo leo "Cuatro y Treinta y dos, vale... es cuatro por ocho" y cuando he terminado esta frase mental, ya he respondido y estoy en la siguiente fórmula.

Me quedo literalmente "a cuadros" cuando me pasa eso. ¿¿¿Cómo puede mi mano responder antes de que yo acabe de leer??? El pensamiento va antes que mover la mano, ¿no?

La otra cosa que me hace gracia es la Composición. Porque me pasa lo mismo. Si me atasco, leo las letras, pero cuando no me atasco, no leo las letras, veo una imagen de la palabra. 

Lo más extraño de todo es que suelo fallar muchísimo esa parte (y eso que soy escritora) Y os cuento por qué. El ejercicio muestra letras moviéndose en círculo. El movimiento es terrible. Bien, si veo una G, una R, y una I, y una A... lo que recibo es la imagen Alegría unida. Supongo que os pasará lo mismo. El problema es cuando no ves esa imagen. Lo que me extraña es que percibes en bloques. Visualmente. No sé si me explico.

Mi cerebro no suma la G y la R. Lo que ve es la finalización GRÍA y a eso añade una AL. Si esos dos símbolos están en el círculo, los ordena sin leer.

Como una imagen. 

Cuando los leo, cuando empiezo a notar E / L / A... entonces es que no sabe lo que es y está probando combinaciones. Suelo fallar, encuentro tres para cada palabra. Y tardo 4 minutos en un ejercicio que sería (lógicamente) sencillo para un escritor... 

Entiendo pues que las fórmulas matemáticas las está contestando (mi cerebro) de memoria.

Ah, pillastre. ¡Jajajaj! Por eso ya están hechas antes de leer mentalmente la ecuación.

Cielos, ignoraba que el cerebro pudiera hacer algo así. ¡Jajajajaj! 

Fijaos en lo que implica: mi cerebro no mira si estoy poniendo 4 ¿?  5 = 20. Mi cerebro lo que hace es si el primer número es más bajo que el segundo y el resultado es más elevado, tiene que ser una multiplicación. 

Pone la X visualmente sin calcular y pasa al siguiente.

Ah, tramposo.

Será pillastre, le voy a dar lecturas y clases de piano... se va a enterar el cerebro este. 

¡Saludos! 

3 comentarios:

Davidel dijo...

En el idoma chino sucede algo similar. Hace un tiempo tanteé un poco el mandarín. Su simbología recrea imágenes y no se lee, se ve. En los albores del idioma se ve de forma más clara que eran simples dibujos. Actualmente es igual, pero son más modernos. Un árbol es un dibujo de este mismo, y bosque, son dos árboles juntos. En realidad es un idioma divertido. Otra historia es la fonética jajaja.
Y sí, lo que dice tu amigo sobre ser madre es verdad. Nunca se está preparado. Aunque personalmente pienso que hay que tener unas cualidades cómo tú tienes, para ser una gran mamá. ¿Me podrías pasar algún enlace a sus videos?
Que tengas un gran día!

Nelly dijo...

Claro, de hecho os invito a todos a seguirlo y ( importante) a ver los anuncios previos a los audios. Eso es lo que le permite tener el canal. Se llama José Carrasco, está en Youtube y trata unos temas del universo fantásticos. Tiene un libro llamado "La Última pieza de tu puzzle". No tiene pérdida. Y si os gusta la meditación, ayuda a dormir a millones de seres!!!

Nelly dijo...

Bueno, es José Carlos 😇😊 pero bueno, 😇 me habéis entendido, seguro.

Publicar un comentario

 

 

 

Creative Commons License
contador de visitas para blogger por paises