Roald Dahl

"Conocí" a Dahl de esta manera: me estaba leyendo "Charlie y la fábrica de chocolate". Por entonces era una pequeña devora-libros, que acabaría hasta con los del vecino y con la colección de casa, de la escuela, etc. Y estaba sentada leyendo cuando el protagonista gordo es absorbido por un tubo, o algo así, en la fábrica de chocolate y yo tenía claro que estando al inicio del libro  -que existían ciertas normas- y a ese personaje "no se le podía matar". Pero algo en la forma de escribir del autor indicaba una perversidad y lo contrario.

Es complicado explicar lo que sentí. Pero tuve que volver atrás porque no lo había leído bien.

Y sí lo había leído bien.

Y fue en ese momento en el que Coso (yo interior) dio un brinco y dijo: "Vaya". Y así conocí a Dahl. Es decir, hizo algo no adecuado para la literatura juvenil (rompió una norma).

Y ahora me estoy leyendo "Relatos inesperados" y ahí sí está Dahl. Ese sí es él. ¡¿Cómo decirlo?! ¡Es...! tiene humor negro. Te presenta algo que no está bien y al final los personajes dan un giro hacia la aceptación. Es decir, te lleva del estupor inicial de "esto no es correcto" a... convertirse en eso que se critica. Pero todo muy sutil, no habla de cosas graves. Sólo me hace gracia cómo enfoca la realidad. Es como si la viera siendo un niño y luego se une a la corriente. Te hace sentir algo raro por dentro. 

C.S. Lewis

Si hay algo que distingue al autor de Narnia es el dichoso Aslan, y toda la esperanza y fe que rodea al personaje. Tiempo después me enteré de que se carteaba con Tolkien, quien le echaba en cara la carga religiosa de su obra. Aslan es Jesucristo. Muere y resucita, todos le esperan. Es el león que salva el mundo. Pero, sobre todo, era la espera del personaje lo que te da pistas. A su alrededor había como un fuerte sentimiento de que las cosas se iban a solucionar en cuanto apareciera Aslan.

¿Sabíais que la figura de Jesucristo y de Superman también están muy relacionadas? El otro día lo hablaba con un amigo mío. Eso de "el ejemplo a seguir" y todo ese idealismo encarnado en un personaje. Es muy fuerte. Pues con Aslan pasaba eso. Toda la obra, al menos la que yo leí, tenía un "eco" de fondo que era la espera, la confianza en que Aslan iba a aparecer.

De hecho, os cuento esta anécdota: yo leí La travesía del Viajero del Alba, siendo muy niña. Y en el cine, décadas después, me senté a ver la película primera de Narnia y miraba la pantalla sin saber que había leído la historia, hasta Aslan. Y cuando aparece Aslan...(no es el mismo libro, yo me había leído el cuarto o el quinto, y estaba viendo la primera película), a mi mente acudieron estas palabras:

"A diferencia de otros niños,... su mundo imaginario era de verdad"

"Un cuadro en la pared que echa agua"

"Salieron huyendo de la isla porque una isla en la que los sueños se vuelven reales está muy bien pero... ¿qué pasa con las pesadillas?"

-¡Yo conozco esta historia! -dije en la butaca.

(Aslan)

-¡¡¡Yo he leído esta historia!!! ¡¡Hay una isla donde los sueños se hacen realidad!! 

Efectivamente. ¡Jajajaj! No lo sabía y me había leído al menos uno de los libros.

Ray Bradbury

Bien, a este autor no le aguanto. Y os voy a explicar por qué. Intenté leer Farenhait 451. La famosa obra. Pero al poco de empezar tropecé con esto: habla de la vecina del protagonista cuya cara era una máscara de luz de luna y...todo muy etéreo, poesía. Y acto seguido entra en una casa y creo que está su esposa con las vísceras y sangre por el suelo.

(¡Meeec!) Alarma interna. Aquí hay algo que no cuadra, en el autor.

Uno de los dos es mentira. Es decir, o la hermosa vecina tenía el pelo rubio plata con aureolas de primorosas flores perfumando el halo de su silueta o las tripas estaban esparcidas por el salón. Uno de los dos Rays es mentira.

Me pone la piel de gallina. Es falso. Juega sucio.

Cerré el libro. Yo no leo a este señor.

Comenté en el primer taller que el autor no estaba siendo honesto y riéndose, me dijeron que la maestría de Bradbury -y por lo que se le recuerda- es por mezclar poesía con algo descarnado.

Mmmmh, no. El auténtico Bradbury es descarnado.

No es la aureola... son las tripas por el suelo.

No me gusta.

No me gusta él. Sé que es raro, ¿verdad? No me gusta su mente. 

De todas formas, es un poco extraño juzgar a un autor por su libro.

A lo mejor era un tipo muy majo.

King tiene una cosa que admiro, aparte del uso tan adecuado de las cursivas. Y es cómo se mete en la mente de los personajes. Veréis, os pongo un ejemplo. En el segundo tomo de It (me refiero, cuando son adultos) un personaje está saliendo de casa. El personaje tiene algún síndrome o trastorno de ansiedad. Y realmente están hablando de otra cosa cuando sin venir a cuento intercala lo que tiene en la cabeza (¡No cojas el taxi, te dará cáncer!) Es tan... absolutamente fantástico cómo lo introduce... es decir, es tan terriblemente fiel al funcionamiento de la mente humana que asusta. Y no tengo ni idea de cómo lo hace. 

Esta muy obsesionado con los "ka..." como sea. Grupos de personajes unidos por el destino. Que son fuertes en tanto que sus vidas se intercalan. Se necesitan unos a otros, como en El Pistolero, y llegan a formar lo que llama "una sola mente". También me gusta mucho Carrie. Y luego está Rita Hayworth y la redención de Shawshank.  

Tiene una escena fantástica para hablar de Andy: "... a Andy le odiaban, entre otras cosas, porque caminaba por el patio como un hombre libre" Es decir, como si estuviera dando un paseo. Pocas escenas me han impactado tanto como esa en la literatura. Un tipo acusado injustamente, encerrado en una cárcel y sin embargo, llevaba la libertad con él. No sé. 

Pero para escenas impactantes, y con esto ya me despido, tendría que señalar cuando el malo de Las sombras de la catedral le dice a la chica "por mí podéis vivir cien años", lo que me dejó helada (es un cruzado que ha visto cosas horribles, ¡ojo a los personajes más inocentes... que casualmente acaban siendo los peores villanos! Tenéis otro ejemplo en Raistlin o en Darth Vader. Es un tipo de villano que lo es por ser al inicio precisamente más inocente y/o bueno que los demás) y Richard diciendo que ha fracasado (Las Horas) porque trata de atrapar la esencia de las cosas en las palabras y no puede...

.... ay, Richard, Richard, no eres un fracasado. Eres un escritor. En eso consiste el oficio y no se fracasa, aunque creas que se fracasa. :=)

¡¡Feliz domingo!!