Magia!
Hoy tengo un concierto que llevo esperando cuatro meses...
Os voy a contar una anécdota.
Hace 3 días reviso un resultado de trabajo.
El resultado está a 0,1 décimas de un premio.
Lo miro. Lo reviso. Y Pienso:
"Bueno,... no he llegado. Pero está bien. Tengo que felicitar el trabajo de aquellos con los que he trabajado este mes."
Una parte de mi mente, sin palabras, señala:
"Te has quedado a dos décimas...¿No te enfada?"
Pienso:
"No. 5,19 está tan lejos de 5,21 como de 5,900000000 o de 9, o de 24. Si tomas los números, no como números correlativos, sino como entidades en sí mismas, son cifras diferentes. Un 5,19 no es un 5,21, y nunca lo será. Y no me enfada".
Ok.
Pasan tres días. Mando una felicitación. Un compañero me contesta en el mismo sentido.
Llega el cierre "definitivo" y depurado. Limpio. Neto. Como lo queráis llamar. Lo abro sin hacerle mucho caso y veo:
5,20.
Un compañero lo ve conmigo.
"Oye, qué bien, ¿no?" Me da un codazo.
Parpadeo mirando la pantalla. "¡Oh, no, bien, no, no he llegado a lo que necesito! porque.... espera... ¡Es peor, estoy a una décima porque tendría que superar...!"
(¿sigue sin enfadarte?)
(ya te dije hace tres días, cerebro, que no, no me enfada. 5,20 sigue estando lejísimos de 5,21...)
- Eeeeh, Nelly -dice mi compañero-... Aquí pone "igual o mayor que".
¡jajajajaj!
¿¿Cómo??
no.
No puede ser!!!
Consulto a mi jefa.
¡NO PUEDE SER!
Es.
Bajo a la cafetería a por un café, bailando. Igual o mayor qué. ¡¡He llegado!!
jajajaja!
A ver... he llegado al máximo de mi "medidor individual de eficacia". No es eso pero se parece.
^_^ vamos, que lo he hecho muy bien!!!
Jo, me moría de ganas de contárselo al Muso pero no puedo.
En fin.
Salu2!!!!!
0 comentarios:
Publicar un comentario