Reflexiones al volante.


Llevaba 24 horas con esta canción metida en la cabeza, y hoy al salir del trabajo hacía un precioso día de primavera. De esos que las nubes parecen de algodón. Y de pronto, conduciendo, comenzó a sonar una versión que me llamó la atención y mientras el paisaje se deslizaba hacia atrás pensé... "¿y si condujera hasta un país en el que nadie me conoce?" Acaricié la idea en mi mente, ... y casi me vi en una playa de arena fina y agua turquesa. Presentándome de improviso con un nombre inventado a un grupo de lugareños y viviendo una maravillosa vida nueva repleta de éxito. 
A veces me gustaría escapar de mí misma, pero siempre me alcanzo. Lo único bueno es que me acabo reconciliando con mi propio ser, aunque hay algunos días, como hoy, en los que me cuesta. Por eso me sorprendió sentir tanta paz al volante y de repente pensé en eso: seguir a ver dónde llegaba. 




Es curioso lo que te puede hacer pensar una canción:



Yo que soy de ir sólo por caminos conocidos, de pronto se me ocurrió una idea muy absurda.  "A fin de cuentas la carretera nunca se acaba... " Esta todo conectado. ¿Quién me impide tomar un desvío y descubrir un paraje nuevo?

Pero luego te paras a pensarlo y te das cuenta de que la idea es una tontería. Lo conocido siempre esta bien. Y reparé entonces mientras cambiaba al carril central, en lo mucho que me llama la atención esto del movimiento relativo en los transportes, en general, y los planos desde la ventanilla de un tren o un coche, en particular. Me explico (aunque no tiene que ver pero ahora le estoy tomando gusto a conducir, lo que me parece muy raro). Cuando viajas, o simplemente te mueves, y te fijas en un objeto que también se mueve... me encanta ver cómo se deslizan a velocidad relativa esos dos objetos entre sí y cómo a la vez se mueve el paisaje. Dicho de otro modo: estar en movimiento y fijarse en un objeto que se acerca a nosotros, en paralelo, y nos sobrepasa. Desde que era pequeña, siempre me ha encantado, sobre todo si le pongo música a la escena.  

Ya sé que diréis: "Nelly se ha vuelto loca" (ya lo estaba, verdaderamente, jajajajaj!) pero... haced la prueba. Se trata de ver moverse un coche desde la ventanilla de un tren, o simplemente seguir al coche que te acaba de adelantar por la izquierda. Me fascina bastante que haya 3 velocidades en un mismo plano. La mía, la del coche que me adelanta, y la que sé que siente un espectador en un plano diferente.

Es decir, para un peatón, dos coches se mueven a cien y ochenta kilómetros por hora. Pero es que respecto a mí el coche que me adelanta se mantiene a unos metros... y va a quince kilómetros hora. De manera que veo tres movimientos en un solo plano y, si me apuras, hasta diría que el paisaje se desliza hacia atrás. Así que ahora me dedico a contemplar la velocidad del coche de mi izquierda o, mejor dicho, a procurar mantener una distancia constante con él. Y entonces pienso: ¿cómo es posible que vaya a dos velocidades diferentes? La mía, y la que percibe un peatón.

De manera que, cuando decidí que no haría caso a la canción y no me escaparía a un lugar remoto del mundo, (más que nada, por no perderme el viaje que estaba haciendo), pensé: esto de las velocidades es algo muy raro. Decimos que la luz es "teóricamente" lo más veloz del Universo, bien, si yo soy un rayo de luz y miro a mi alrededor: ¿¿¿entonces qué veo??? ¿Esta todo congelado?, pensé mientras conducía...

Y todo esto viene porque el otro día mientras estaba meditando en un Templo muy chuli al que voy, me dio por preguntarme: "Esa chica está sentada delante o detrás?????"  jajajaja!! Estaba sentada en "ambos" sitios a la vez. Delante mío y detrás del que estaba en primera fila. Y pensé: imaginemos que somos un rayo de luz (dado que la tierra de hecho se mueve en mi latitud a unos 980 kilómetros hora que no sentimos) pues bien, puestos a imaginar, en vez de 980, vamos a 300.0000 kilómetros segundo. Si esa es nuestra velocidad acostumbrada, ¡hasta sentimos que estamos quietos! por tanto, ¿qué puñetas es la luz? ¿y de dónde sacamos la idea de que no puede haber nada más veloz?

Como tales preguntas quedaron suspendidas en el aire al terminar la canción, decidí que dedicaría el resto de la tarde a labores que son en sí un refugio, tales como leer, o disfrutar de escribir este blog. Cosas sencillas que ayudan a recargar las baterías energéticas que todos llevamos "dentro" (y de paso a ir al gimnasio!!!!!) 

Cualquier aportación de "cuántica", sobre música, libros o experiencias al volante (o reflexiones de autobús, como las llamaba un amigo mío), ¡son bien recibidas!
Saludos!!!

0 comentarios:

Publicar un comentario

 

 

 

Creative Commons License
contador de visitas para blogger por paises