Origami y El principito



Como estaba un poco choffff esta mañana decidì hacer algo diferente. No sè si os ha pasado alguna vez que sentìs que necesitàis un cambio. Puede que porque algo no haya salido como esperabais o, porque sí, porque de vez en cuando variar ayuda.
 
De camino a la exposiciòn de Origami del Museo de la Real Imprenta, decidí parar en la biblioteca para pedir en préstamo "El Principito" (por recomendación)
 
El libro lo leí de niña y no me gustó. De hecho, pensé que no era una recomendación adecuada para la edad que teníamos entonces. Me pareció un libro triste que hablaba de los problemas de los adultos, que se deprimían con la mera existencia, por entonces tan colorista y alegre en mi opinión.
 
Ahora igual es momento de releerlo.
 
La exposición de Origami fue toda una sorpresa. Es divertida porque genera en el espectador admiración por las cosas sencillas y sorprendentes que se pueden conseguir con formas elementales, orgánicas o hiperrealistas (en algunos casos):
 
 
 
  



Dan ganas de ponerse a practicarlo.
Porque seguro que es de esos hobbies que traen consigo paz y armonía (y desarrollo de la paciencia).





 
 


Lo mejor del origami es que algunas figuras son casi abstractas, de manera que tu mente las recrea siendo formas menos "realistas" que las del mundo cotidiano. Apenas cuatro líneas curvas y ves un gato. Pero no sólo un gato, sino un gato con una determinada actitud.

Sería interesante aprender unas figuras sencillas, solo por ver lo que se siente practicando Origami.

La exposición con figuras de todo el mundo estará abierta hasta el 30 de agosto.
Saludos!!





0 comentarios:

Publicar un comentario

 

 

 

Creative Commons License
contador de visitas para blogger por paises