He terminado el libro.



Después de un año y medio de trabajo, esta mañana ponía fin a la historia (o quizá no, quién sabe...), de magos y brujas, leyendas y hechizos, amores, desamores y batallas, que he estado escribiendo.
Ahora queda lo más difícil: buscar una editorial.
Una vez alguien me preguntó qué hacer cuando un libro está terminado. Pues es algo parecido a buscar empleo: elaboras un proyecto editorial y luego... a llamar a puertas. Si tienes suerte, te dirán que no todos... menos uno. Si no tienes suerte la novela termina en un cajón. Pero lo más importante es, ¡no rendirse!
¡Me muero de ganas de verlo publicado! Y voy a trabajar duro para poder hacerlo.