Una nueva historia.
Tuve que dejar una historia que iba muy bien encaminada a medias, porque uno de mis personajes principales -como ya le advertí en su momento-, digámoslo así, pasó de héroe a villano. No diría tanto villano, simplemente pasó a traidor. Traté de salvarlo como pude, un abandono a los demás personajes que en el último instante sería subsanado, pero era sentarme frente a él en papel y me asaltaba la angustia.
Allá fue el libro.
Los de la Tertulia literaria, disgustados. Decepcionados, tristes.
En fin. Este verano comencé otro. Lo escribo de un modo desordenado y sin disciplina. Trata... de una señora que es cliente habitual de una librería. Es un libro de magia y aventuras, en verdad la protagonista es una chica de dieciséis años que se queda un verano trabjando en la ciudad de Madrid. Vive con su hermana, Berta... y debido a los apuros económicos de ésta, comienza a emplear sus tardes ayudando en una librería.
No os cuento más.
Llevo casi cien páginas. Pero es tal el desorden que no sé qué estoy escribiendo, jajajajaj. Tengo que ordenarlo un poco. Es una novela infantil, género en el que al parecer según mis amigos me muevo como pez en el agua.
Otros me dicen que recupere la historia antigua, pero esa, aunque bien hilvanada y... llena de ilusiones, tendrá que quedar apartada de momento.
Y tengo unas ganas locas de escribir algo utilizando el tono de la niña protagonista de "La Elegancia del Erizo" ¡Lo que me río con esa niña! Que desayuna chocolate, leyendo manga. Acaba de aparecer un profesor japonés y está descubriendo a la portera. Los diálogos internos de la niña son para troncharse. Eso sí, toda la parte de filosofía me resulta un poco coñazo. Es una pena, esa cría tiene muchísimo potencial. Deberían escribir un libro así, en ese tono.
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3 comentarios:
Con los personajes hay que tener mano dura, a la mínima se rebelan y deciden vivir aventuras fueras de las paginas en blanco...
Hay veces que hasta se van a vivir con otros autores.
Así que ya sabes átalos en corto...
Sí... este mío era lo que Aragorn al Señor de los Anillos.
Y va y los abandona.
En fin... no puedo atarlo, no me quiere, Jerom, jajajaja.
Pero en mi nueva novela no hay tíos. Bueno, hay uno pero...esta idealizado... así que... Se llama Tomás.
Siempre me encantó ese nombre. Un tipo generoso debe llamarse Tomás. Sin duda...
:)
Si algún día lo retomo, el personaje -basado en un alter ego real-, abandonará a los protas en el peor momento, lo pasarán fatal,... sí el tema es la traición. Jo. Y... y luego volverá. Supongo. En fin, el tema es que deje de ser el estupendo y maravilloso guía y... y se me ha olvidado lo más importante. Ah, sí, que abandona a los protas porque se entera de quién es y decide volver con su familia...
Pobre Maia, y ella que confiaba en él.
Pero luego vuelve... y entonces ya no mola tanto.
Je,je,je,je...
Besos,
Eva.
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