Para que veáis lo injusto de las cosas que me pasan.

Hace un par de noches soñé con que le pedía a mi compañero de trabajo que fuera mi maestro, o que me indicara (más bien eso) un maestro budista. Y él, en el sueño, contestaba: No. Rotundo. Yo insistía y él decía: No, te irán llegando textos conforme estés preparada.

Y ya está.

Como llevo días con un revoltijo de sueños de lo más agotador, se lo conté. A mi compañero. Y nos enzarzamos en un (¿cómo llamarlo?) bueno, yo me enfadé muchísimo. Al llegar a casa, y conforme pasaban las horas, super enojada y más enojada y más enojada... Y cuando me fui a la cama, dije mentalmente y en voz muy alta:

(Mentalmente)

"Querido Coso, a ver si cuando tienes que darme algún mensaje adoptas otra forma y no la del compañero. ¿Vale? Porque pedirle ayuda al compañero es arriesgarse a...." luego seguía la palabra fracasar y como ser humano. Seguido de un: "¿Lo entiendes de una vez, Coso? Elige una forma diferente". Es más, me levanté y escribí esto en mi Libreta Sagrada de Enseñanzas. Fue lo más... ¿¿cómo se dice cuando te cargas algo que es sagrado??? bueno, yo sé que la libreta no es sagrada para vosotros, pero para mí lo es. Atesoro todas las frases sabias que me dice el compañero. 

Y puse eso.

Y apagué la luz.

Y me dormí.

Y soñé con el infierno.

Soñé algo HORRIBLE, con muy poca luz (luz roja, oscuridad) y "demonios", "espíritus"... llamadlo cómo queráis, y una puerta abierta y venían a por mí y a por más gente y grité y grité y me desperté. Eran seres infernales enfadados que pinchaban a los vivos y querían algo de ellos pero no sé qué y no quiero saberlo, la verdad. 

Temblando.

Eran las 03:17 horas de la madrugada.

Me tapé con la manta la cabeza y pensé:

"Tranquila..., tranquila. Sólo es un sueño, los sueños son mentiras, Eva. Tranquila, cualquiera puede tener un mal sueño. Sólo es un sueño, solo es un sueño, no es verdad, solo es un sueño...."

Y en ese preciso momento se abre sólo el grifo del cuarto de baño.

En cascada. 

Mirad... yo soy científica. Bueno, no soy científica. Pero tengo los dos pies en la Tierra. Sólo quiero que entendáis que no es nada justo para mí que me pasen estas cosas.

El grifo, no dejaba de echar agua.

Yo bajo la manta "no es verdad, no es verdad" y un grifo cerrado que misteriosamente se convierte en una cascada. Así, porque le apetece. Decide abrirse en momentos fantabulosos. El resto del tiempo está callado.

¿Qué hago yo ahora? pensé.

"No me voy a levantar", "ni de coña".

Os voy a contar lo que hice.

"Yo sé que esto de alguna manera lo provoco yo", pensé, asustada, "porque estoy asustada, porque me siento vulnerable..."

Lo que hice fue imaginarme TODA LA LUZ DEL UNIVERSO. Toda. Invoqué ángeles, espíritus buenos, budas sagrados, luz luz luz y luz. Mucha luz y  mucha protección.

Y me dormí.

Lo siguiente que soñé (antes de despertarme con el despertador) eran noticias en la televisión relacionadas con Donald Trump. Salía en todas las cadenas. Como si fuera algo que afectaba a todo el mundo. Políticamente hablando.

¡Jajajaja! Decídme que hago yo soñando con Donald Trump. Si ni siquiera sigo las noticias.

Le conté a mi compañero el sueño infernal y me desenfadé porque él sigue diciendo que busque un maestro que sea un Lama. Yo no tengo Lamas a mano. Los hay, al menos en un Templo, pero enseña en horas en las que yo trabajo y... y además las veces que he ido pues... no sé, tampoco me enteraba de mucho. Yo no sé recitar en tibetano. No sé nada. Los cursos ya están empezados. Además, soy una persona que lo cuestiona todo, igual no les caigo bien.

Quiero avanzar pero no encuentro más que obstáculos.

Y tengo miedo.

¡¡¡¡Saludos!!!!