Dios existe y me manda audios...

Aquí lleva un tiempo sucediendo cosas raras.
Juzgad vosotros:

El pasado sábado me llegó un audio de YouTube (faltaría el niño mensajero entregándomelo cada noche), titulado "La culpa". Dado mi feliz estado emocional... Y que este es un tema ya hablado hace unos meses con una experta en psicología... lo desprecié. No le hice caso. Lo ignoré completamente. El Universo se equivoca. No va a acertar siempre. No tiene por qué hacerlo.
Ese vídeo no es para mí, no lo necesito (ya me sé esa lección) y paso... 
Al día siguiente tuve una gran discusión con seres muy queridos, sobre el ego y las creencias erróneas, y el concepto de inteligencia. Me acusaron de ser ingenua. Porque yo no creo en una sola inteligencia. Además, para mí, sí me fuerzas a darte una respuesta, diría "Capacidad del ser humano o cualquier animal, para enfrentarse a un problema nuevo". Luego en realidad... Lo estoy enfocando mucho a creatividad. También es capacidad para comprender. Pero la inteligencia tiene muchos aspectos. Ningún ser humano es superior a otro. Uno igual es un genio en mates y el otro un experto conductor. 
El lunes, refunfuñaba para mis adentros cuando abrí YouTube y el audio que aparecía en primer plano ponía "La Inteligencia". Vale, un guiño que se puede explicar fácilmente con que Google o los teléfonos nos espían.
¿Y lo de La Culpa? Casualidad. Ya que ese día mis palabras más pronunciadas eran feliz, vestido y fiesta. Yo no usé la palabra culpa en más de diez semanas... Dejé de usarla hace meses. Es una lección aprendida. 
Tras comenzar el audio fui a trabajar. Tres ordenadores no funcionaban. Entre medias, yo respiro hondo y antes de morir el penúltimo ordenador me muestra una foca bebe dormitando sobre el hielo con una sonrisa poco menos que budista. Tras este salva pantallas fundido a negro y el ordenador se rompe. 
"Vale, je je. Ya lo pillo. Es una prueba para que no me estrese". Donde hace meses habría tenido un enfado considerable, ahora no me afecta. Abro por fin los sistemas en otro PC, abro el Excell y comienzo a atender muchas demandas muy rápido, desoyendo mis advertencias internas sobre que me estaba agobiando. Al final, intento poner orden. Hay 3 personas pidiendo cosas, así que derivó a la tercera a mandar su petición por mail. Esta tercera persona se equivoca de botón, pierde lo que necesita, se levanta y me echa la culpa a mí por no haberla atendido de inmediato. Pensad en esto, yo soy su jefa, no su secretaria. Pero lo peor es que lo que ella pedía es un "atiendeme puedas o no". Sonriente, traté de decirle que eso que le había pasado con el botón le pasa a más gente y que no se preocupara. Pero de algún modo inexplicable ella me echaba a mí la culpa de haber borrado sin querer una campaña. Es como "me salto un semaforo, pero la culpa es del que se ha tropezado conmigo en el ascensor". 
Y yo me enfadé.
No poco, sino mucho. Tanto como para preguntarle si lo que quería era que no atendiera a nadie más que a ella. Y a mí tener que ponerme así no me gusta. 
Rápidamente otro jefe medió y le quitó la razón de inmediato. Yo entiendo que ella estaba enfadada por su situación, pero eso no le da derecho a culpar de esa situación a los demás. Menos aún, a los que queremos ayudar.
Casi de inmediato, los 6 excels que tenía yo abiertos dejaron de funcionar. Informes, Word, pantalla... Se colapsó todo. 
Me subió la tensión y las pulsaciones. 
No soporto estos disgustos. 
Mi ordenador estaba congelado. 
Me había alterado y había contestado con enojo. Ella pronto cambió la versión de sus palabras hacia mi. Encima, mintiendo. 
Pero el daño ya estaba hecho y era un daño sobre toda la humanidad. 
Pasamos de "vivo en un mundo donde confío en la armonía" a "vivo en un mundo donde tengo que defenderme de visiones erróneas y ataques". 
Obviamente, eso cambia las cosas. 
Y recurrí al Muso. Antes de hacerlo, debatí internamente pues... ¿Cómo trasladarle lo que había pasado sin soltarle un rollo tremendo que además a él no debería importarle? (mi yo interior dice que a no ser que algo cósmico haya de por medio.. A saber que significa "algo cósmico". ¿Una ley universal? Jajajja).
Decidí resumir en "tengo un disgusto tremendo". 
Y mira tú, contestó. 
Y cuando me di cuenta de que el vídeo del sábado era sobre la culpa y lo deseché... Nos reímos. Tanto él como yo. 
Sí, es raro. 
Es como que Dios te de un paraguas y tú lo desprecies y luego jarrea. 
Pero más raro aún es lo siguiente. He llegado a casa, me di una ducha. Me sentía fatal. No tuve un buen lunes. Sigue siendo el problema de siempre. Tratas de ayudar y es peor. Eres buena y es peor. Cada uno ve solo lo suyo. En este mundo, ¿qué pasa, que hay que defenderse todo el tiempo? ¿Es mejor ser malo y fuerte? Me llega un SMS por Twitter del Dalai Lama, lo ignoro. Pienso "sí, esta todo muy bien hasta que alguien viene con un palo. Entonces o lo paras o...".
Sentada en la cama, antes de dormir, atribulada, confusa, triste y enojada... decido atreverme a abrir YouTube. 

¿El título del vídeo?
" Las emociones negativas". 

Y ahora decidme, si todo esto estaba solo en mi cabeza... Como sabe el puñetero YouTube lo que tiene que enviarme. 




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