Recuerdos bellos...
Mezcolanza de la Nelly-expemeroteca.
Estando sentada a la orilla de un lago, observándo los pájaros, vi un destello turquesa y naranja a mi izquierda. Del susto, me sobresalté y observé atentamente, tratando de averiguar qué podía ser tan bonito...
Era un Martín Pescador.
Nunca había visto uno en vivo. Y me sorprendió muchísimo que el pico ocupa lo mismo que su cuerpo. El martín salió del agua y se posó en una rama baja del árbol que tenía al lado. Estaba pescando. Cada vez que se lanzaba en picado era como ver una gema lanzándose al agua. Azul turquesa y naranja. Me quedé maravillada....
El día que un delfín con su cría nadaban en la Ría de Aldán. Y yo, en una pequeña embarcación, me alegré muchísimo. Y un pescador y mis padres, dijeron: "No se va a acercar". Y el pescador dijo: "Deíxalo, rapaza... está con su cría. Non vai a acercarse"
Pero yo metí el pie en la proa del barco, justo en el pico, pensando: "Llámalo, llámalo""
¡Estoy aquí! ¡Hola! ¡Hola, estoy aquí!
Estoy aquí, dile que estoy aquí...¡te estoy saludando!
Golpeando el agua con el pie.
Y de repente al mirar hacia abajo vi un delfín bebé panza arriba. Justo debajo de mi pie, panza arriba, mirándome.
Me volví loca de alegría. Yo le miré, él me miró. Y entonces saltó a dos metros de la proa del barco, justo delante de mi nariz.
Mis padres y el pescador se quedaron boquiabiertos. Y el pescador dijo:
-Eso lo ha hecho por ti... ¡es increíble! ¡Lo ha hecho por ti!
Y el delfín bebé y su mamá siguieron nadando...
Dando un paseo... a la puesta de Sol por una zona recreativa situada en lo alto de un monte, vi un conejo a un lado del camino. Estábamos solos, un amigo y yo... y lo señalé:
-¡Mira! ¡Mira, qué bonito!
Y el conejo se irguió sobre sus patitas y yo me acerqué. Lentamente. Un paso, luego otro, otro... por el camino de tierra.
De repente.... se oyó un ruido a mi izquierda y una bola de pelo en la que distinguí una enorme cola naranja salió de un matorral y se chocó contra mis pies.
¡Jajajajajaj!
-¡AAAAAHHHHHhhhHHH!
El grito fue mezcla de susto y maravillosidad...
Era un zorro.
Jamás había visto uno, así que no sabía que eran "tan bajitos". Pensaba que eran como lobos... así que no sabía que era lo que me había golpeado, solo vi un borrón naranja con cola, peludo.... y él estaba tan concentrado en el conejo que cuando quiso frenar la carrera se dio contra mi pierna.
De tal forma que yo salí corriendo hacia atrás, el conejo salió corriendo hacia la puesta de sol, y el zorro, tras darse de morros conmigo salió corriendo hacia el bosque....
-JAJAJAJAJAJA -yo, ataque de risa al segundo del encontronazo....
-JAJAJAJAJ ¡Mi madre, ¿lo viste? ¡Era un zorro! ¡Él no te vio! -dijo mi amigo
-JAJAJAJAJAJAJA 🤣🤣
🤣🤣🤣
Cada uno en una dirección.
En un hotel de 5 estrellas de Tokio....nos avisaron de que había una convención internacional y que gente muy importante del gobierno estaba allí alojada. Subiendo en un ascensor, una señora mayor, vestida con kimono, en silla de ruedas, iba a mi lado. El ascensor paró... la doncella que empujaba la silla salió de él. Nos miró.
Inclinó la cabeza en silencio.
Volvió a entrar en el ascensor, se puso tras la silla de su señora.
"¡Ha hecho esto solo para saludarla antes de empujarla fuera del ascensor!", pensé.
Miré a la señora en kimono, en la silla de ruedas. Que estaba justo a mi lado.
La señora sonrió y bajó la cabeza como diciendo "sí, reconozco".
Me quedé tan profundamente impactada.... 😶👘 Era... no sé, como si hubiera notado mi mirada. No sé... jamás he visto tanta elegancia...
En el parque del Retiro... durante una Feria del libro, iba caminando entre miles de personas, cuando vi a una chica con algo que no era un perro.
Me detuve.
"El morro, los ojos..."
Me acerqué al animal y extendí mi mano delante de él. Su nariz tocó la palma abierta.
-Esto no es un perro -le dije a la dueña-, es un lobo.
La dueña se detuvo.
-Se llama "pastor checoslovaco" -me contestó.
👁️ Observé al animal. Y la dueña. Y de nuevo al animal.
-Pero es un lobo -dije, asombrada.
-Lo es -me contestó-, es una mezcla. Sí, imita al lobo.
(Los dientes, el hocico)
-Es bellísimo.
De repente, más gente se paró. Mucha. Era un sitio pequeño, había cientos de personas caminando y al pararme yo y admirar al animal se paró más gente.
-Es... es increíble -dije, aún asombrada.
Y entonces se paró un niño, una niña, un adulto, otro adulto... y la dueña, como todos querían tocar al perro, me miró y me dijo:
-Nos vamos -y tiró de él-, estamos llamando mucho la atención.
🦋👁️
Y se fueron.
Solía escaparme por la ventana cuando era niña para ver las perseidas. Y una noche de tantas de verano, lo hice. Salté, me fui a tumbar boca arriba en medio del camino que llevaba a la casa de mi abuela. Vi muchas... estrellas que se mueven por el horizonte.
De pronto un fulgor verde y azul partido en dos.
😶 No pensé que pudiera ser una estrella fugaz.
Era verde.
Una enorme estela verde y azul.
-??????????
Años después lo busqué en Internet. Se llama magnesio.
Caminando por Peñalara con mis compañeros de clase, ... el profesor dijo que era muy tarde y teníamos que volver... así que bajamos una ladera llena de nieve, mientras alguien decía que no encontraba el río.
De pronto se escuchó ¡ZAS!
Una de mis compañeras había pisado hielo, el hielo se rompió, y se cayó al río.
-¡Mira! 🤣🤣🤣🤣🤣 -nos reímos tod@s-, ¡¡ya sabemos por dónde va el río!!
Tras hablar y reír, pasear y hablar, cenar y conversar... él sacó su guitarra y se puso a cantarme canciones hasta las 3:00 a.m. de la madrugada.
En inglés.
El cementerio judío de Praga (su silencio)
El hotel destartalado de Venecia (se caía a pedazos y era grandioso)
El tacto de la arena del Sahara (parece harina...)
El color verde de Irlanda cuando cruzas la isla de Dublín a los acantilados de Moher... su luz.
El color naranja de la piedra de Roma, cerca de Saint Angelo, al atardecer...
Todas esas cosas había visto. Y, sin embargo, nada me impresionó más que aquel día que viajábamos en un tren sin conductor y entonces...
"Odaiba"
"¿Qué se me ha perdido a mí en Odaiba?"
"Si ya verás... cuatro atracciones y un enorme robot... bah..."
Llegamos a Odaiba.
Yo no sabía que Tokio tenía mar.
👁️👁️
Desde nuestra posición veíamos rascacielos y el mar. Y un espacio inmenso.
-¡Madre mía!
Mientras lo veía, una viajera que iba sola, me dijo:
-Tú no has estado en Shangai, ¿verdad?
👁️👁️
-No.
He visto la Torre Eiffel... si eso sirve de algo. 👁️🤔 Y un señor de La Latina me dejó ver Saturno a través de un telescopio -que es profesional-, y además por casualidad conocimos a un amigo suyo en Quintana (por una venta en Wallapop) y nos enteramos de que ese señor estaba jubilado y era presidente de algo astronómico.
Pero todo eso da igual. Porque cuando puse el ojo en el tubo del Telescopio vi esto:
Y os vais a reír.
Levanté la cabeza, miré al señor, y le dije:
-¿Es de verdad?
🤣🤣 Que de todas las tonterías que le dicen, aquella se repite mucho. Muchísimo.
Y volví a mirar porque no me lo podía creer. Estaba viendo los anillos de Saturno.
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