En el que me toca la lotería

 No quiero que os pongáis nerviosos. Estoy hablando de diez euros.

Ayer.... bueno, yo ya sabéis que os digo siempre que hay algo más, que si mi compañero no se qué, que si las casualidades raras que si... ¿verdad? Que adivino cosas...


Este libro de aquí tiene capítulos titulados: "En el que...", y me hace mucha gracia porque yo lo leí siendo muy pequeña, pero ahora resulta que mi blog es así. Me encanta esa forma de titular, pero no es mía. Esta bella criatura del libro no sabía qué iba a ser de mayor, así que se hace bruja y se lo pregunta a su bola de cristal, en lugar de decidir y luego ser... primero es y luego decide para cumplirlo. Yo lo llamo "trabajar a la inversa". Funciona.

Para libros. Es decir, a veces le tienes que preguntar a tu mente el resultado y tratas de llegar a él. El libro es una "monada", la pobre tiene que aprender magia y superar un examen y todo esto porque seguía sin saber qué contestar a sus mayores... hasta que al final dice, ¡uy, pues miro en mi bola de cristal! y descubre que va a ser.... No os lo digo.

Habría sido mi compañera de Universidad, je je je, exactamente, en la clase de al lado. 

Yo ayer salí a la calle, fui a preguntar una cosa al gimnasio... no sé si volver, y luego a desayunar pero cuando estaba cruzando un cruce lo vi.

Y brilló.

No es brillar la palabra es sentir diferente.

Un puesto de Loterías.

Yo, ya sabéis, hablo con un "algo" interior (o exterior) y, claro le pregunté. 

(Sí)

¡Oh, contestó!

No con las palabras, justamente, es más... es más... es como... Sí.

Que no pierdas esa sensación es importante. Así que sin apartar la atención del puesto, pensé:

"¿¿Pero cuál?? ¿Un Rasca7? ¿un... hay cien mil boletos??? ¿cuál cuál cuál????"

(en el que te has fijado. El de los soles amarillos)

"¡Rasca siete! ¡Se llama... se llama "Rasca Siete!" o algo así!"

Me acerco, me acerco, me acerco.

-¡¡Buenos días!!

De cerca veo los boletos y eso "no" es un "rasca 7". Pero Coso dijo "en el que te has fijado"

Así que yo dije:

-¿¿Me da uno de esos... de esos de ahí....??

De esos, ya sabe, de esos. No sé que són. Pero tiene soles (uy, pongo tilde en palabras importantes, es inconsciente... je je je, acabo de acentuar "son") Je, je je... mira, lo voy a dejar, es gracioso.

No-sé-qué-son

(pero es)

-De eso de los soles.

Me da un boleto.

Me pregunto a mi misma: "¿Pero está premiado?"

(Sí)

La sensación no se va.

¡No se va, no se va!

(no lo rascas aquí)

¡Como la bola de cristal! ¡Al revés, al revés! ¡De atrás adelante, en lugar de presente a futuro!

Y entonces... me olvidé.

Iba a rascarlo con mi amiga N. en la cafetería. Me olvidé. Llegué a casa donde debería haberme acordado. Lo dejé en el bolso y me olvidé. Me puse a trabajar. Hice una hora extra. Era de noche, cerré la oficina virtual, eran casi las Once y me olvidé, me olvid...

-¡¡Ay va!! ¡El boleto!

Bien, lo busqué en bolso.

Pero... ¿va a estar premiado?

(((((sí))))))

Más débilmente, fue la respuesta.

Igual no lo está.

(((((ráscalo con una moneda de las que tienes donde meditas)))))

¡Vale!

Me acerco a la mesa y -a oscuras-, tomo una moneda de las de diez céntimos.

(((((((si la moneda es de cinco céntimos, tendrás un premio. La moneda es color cobre))))

Es de noche, estoy a oscuras y la moneda es de diez céntimos. Me digo "bah!" y voy a mi cuarto, enciendo la luz, me subo a la cama con el boleto y mi agenda y me apoyo y me digo: "Bah, ¿cinco céntimos? ¡Venga, qué absurdo! Ráscalo... si no va a tocar" Y miro en mi mano la moneda...

Ya es de cinco.

¡Jajajajajaj! Yo pensaba que había cogido una de diez céntimos. ¡Claro! ¡A oscuras!

"Pero... si ya es de cinco"

Rasco.

Primer juego, ... PREMIO.

¡¡¡¡Ay ay ay!!!! 

Espera, ¿hay más? ¡¡¡Tiene más!!!!

Muy débilmente, me llega la respuesta (((sí)))

¡¡Ay, que voy a ser super millonaria!!!!

Jajajajajajjaja.

Olvidaos. Os lo he dicho, siempre son premios pequeños.

Segundo juego.... PREMIO.

-¡¡¡Halaaaa!!!!!

Si ya me toca el tercero....

... pero no.

Sé que vais a decir que no tiene relación, pero creo que no fue casualidad que sintiera eso al pasar por el puesto. No sé... iba contenta. No me refiero a ... feliz en plan risueño, más bien iba diciéndome a mi misma que tuviera menos agobios, que fuera más desprendida (flexible) y que disfrutara de la vida y el presente. Y entonces es cuando vi el puesto, "brillar". 

Claro que... puede ser casualidad.

¡Saludos! 

¿En qué me voy a gastar ahora mis diez euros? ¡A lo mejor en una entrada al gimnasio por los días que quedan de mes! ¡O en ir tres veces a la piscina! ¡Uy, no sé... jajajajjajajaja! 


3 comentarios:

Davidel dijo...

El otro día a través de un sueño me llevé 150€. Ando muy cerca de premios muy grandes y no existe la casualidad. En enero por despistado dejé de ganar 30.000€!! Me llevé algo más de 1000€, asi que no me quejo jjj. Solo juego si siento ese algo. Seguiremos soñando y divirtiéndonos

Nelly dijo...

Yo creo que solo toca si lo vas a usar para cosas buenas. 😊😋 Enfoca así en tus sueños!

Davidel dijo...

Hoy he podido ganar 60.000€!! Madre mía... Si, tienes toda la razón. La cuestión es que realmente estoy pleno y estable en ese aspecto. Por eso no suelo jugar. Voy a pedir para un crucero jajajaja

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