Misteriosamente contenta.
Da igual su respuesta, sabía que iba a saltar con lo que ha saltado.
Hasta me he preguntado si le estaba "tendiendo una trampa" sin saberlo. Ha respondido lo que sabía que iba a responder. Y en el mismo sentido.
Me comporto según me etiquetas.
Es decir: me dan igual tus etiquetas.
Hombre, defensivamente, está bien.
Bueno, de hecho, es la repera.
Me he pasado de un extremo al otro. De la confianza ciega y la esperanza de que pudieran verme... al descubrimiento de que no es verdad y la misma apatía que el resto (muchos) de seres humanos.
Ahora que eso me ponga contenta ya es más raro.
Igual no es apatía. ¿Indiferencia?
O a lo mejor no tiene nada que ver con esa conversación. A lo mejor me he puesto contenta en ese momento por casualidad.
Misterios, ¡misterios sin resolver!
=)
0 comentarios:
Publicar un comentario